enfermeras de Segovia se van a Madrid

El Sindicato de Enfermería SATSE, ha realizado una macroencuesta sobre la violencia en el ámbito sanitario a un total de 7.359 enfermeras y enfermeros de todas las comunidades autónomas.

Los datos extraídos indican que ocho de cada diez enfermeras y enfermeros de Castilla y León han sido agredidos mientras desempeñaba su labor asistencial y de cuidados en un centro sanitario o sociosanitario. Asimismo, cerca de la mitad lo han sido hasta en cinco ocasiones y cerca de un 13 por ciento en más de 10 ocasiones.

En concreto, más del 77 % de las enfermeras y enfermeros consultados en Castilla y León ha sufrido alguna agresión, ya sea física o verbal a lo largo de su vida laboral por parte de pacientes y/o familiares.

El mayor porcentaje de profesionales agredidos se ha registrado en los servicios hospitalarios, ya que hasta en el 56,60% por ciento de los profesionales que trabajan en este ámbito asistencial aseguran haber sido víctimas de una o más situaciones de violencia.

Cabe destacar que han sido agredidos de manera reiterada, casi el 50 % han sufrido agresiones en hasta cinco ocasiones, más del 12% aseguran haberlo sido en más de 10 ocasiones y casi un 10 % solo han sido agredidos una vez.

El ambiente laboral en los centros sanitarios y sociosanitarios, así como la relación con los pacientes, ha empeorado en los dos últimos años, y así lo manifiestan más del 79 % de las enfermeras y enfermeros consultados en Castilla y León.

Al preguntar acerca del tipo de agresión sufrida, se constata que las formas más frecuentes de agresión son los insultos, en un 76,6 % y las amenazas  en un 71,85%. En cuanto a agresiones físicas, han sido el 17,55 p% de los encuestados/as .

Además, más del 60% de los encuestados en nuestra Comunidad afirma que no ha notificado la agresión en su centro de trabajo ni la ha denunciado ante la Policía.

SATSE considera que todas las administraciones públicas y empresas sanitarias privadas deben actuar de forma conjunta teniendo como referente una Ley estatal que luche esta problemática.

A juicio de SATSE Castilla y León, estas cifras son una llamada de atención para las administraciones, y considera que se debe poner en marcha una campaña de concienciación dirigida a la población que recuerde que los profesionales sanitarios son autoridad pública y las consecuencias que puede tener una agresión a estos trabajadores.