La Junta trabajará para evitar la erosión del terreno y la contaminación de acuíferos tras los incendios de La Granja y Pedro Bernardo
Mañueco visita la base de La Casilla (Segovia), donde anuncia un incremento del tiempo de trabajo del personal de prevención y extinción hasta los nueve meses al final de legislatura
El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, comprometió hoy planes de actuación para la superficie calcinada por los incendios de La Granja, que afectó al Parque Nacional de Guadarrama a principios de agosto, y el de Pedro Bernardo (Ávila), ocurrido a principio del verano. Estos programas prevén evitar la erosión del terreno y la contaminación de acuíferos, principalmente, para en unos meses apostar por la reforestación en aquellos espacios donde la regeneración no se produzca de forma natural y espontánea.
“Ya están en marcha y serán una realidad de forma inmediata. Queremos consolidar el suelo para que no haya desprendimientos cuando lleguen las lluvias de septiembre”, explicó el jefe del Ejecutivo durante una visita al personal de la base helitransportada de Las Casillas, entre Sepúlveda y Riaza.
Además, añadió, con este tipo de políticas la Junta “busca un compromiso de una década con la zona afectada por el incendio para regenerar y restaurar todo ese terreno sometido al pasto de las llamas”.
Mañueco aplaudió el trabajo de los 4.544 componentes del personal que trabajan todos los años en Castilla y León para atajar y prevenir los incendios. Tuvo un recuerdo especial para aquellos que se desplegaron en el fuego de La Granja (Segovia), que “no ha sido el único, pero sí el más importante y sensible”, y que contó con 617 personas.
En este sentido, saludó a algunos de los trabajadores que participaron en las labores de extinción del mismo y que hoy estaban presentes en La Casilla, desde la que partieron muchos de ellos; y confió en que las condiciones meteorológicas y la “apuesta de la sociedad” permita seguir en “la línea de las últimas semanas, con incendios pequeños y controlados de forma rápida”, como el declarado en Candeleda (Ávila) en las últimas horas.
En presencia de algunos de ellos, aprovechó también para “hacer una apuesta por la estabilidad en el empleo de las personas que trabajan en la prevención y extinción de incendios”. Por ello, anunció la intención de incrementar los meses que trabajan en esta materia, para llegar a final de legislatura a nueve meses, que es un tiempo “muy importante”.
Igualmente, se ampliará la cobertura anual del personal fijo discontinuo de la administración, de acuerdo con lo firmado en el Diálogo Social de 2018 a 2020, que ha permitido una mejora funcional y temporal en los Centros de Mando y una mayor cobertura de autobombas a lo largo del año, y análisis de situación cubierto este período. Así, se crearán nuevas unidades de autobomba con cuadrilla permanente durante todo el año en función de situación diferencial del territorio de la Comunidad; se renovarán progresivamente los medios materiales de la administración (autobombas) y de las infraestructuras necesarias (medios de vigilancia, bases aéreas y de autobombas, puntos de agua y cortafuegos).
También se contempla la mejora en la dotación de personal técnico y de apoyo en los centros de mando y refuerzo y creación de equipos para apoyo en los puestos de mando avanzado en los incendios forestales (PMA); así como la incorporación progresiva de nuevas tecnologías en el operativo y mejora de los elementos de seguridad y comunicación de todo el personal del operativo.
Todo ello irá “acompañado de una mejora continua en la formación de todo el personal que participa en la extinción de incendios”, dando un papel más relevante al Centro para la Defensa contra el Fuego (CDF), que reforzará su dotación personal para mejorar las labores formativas y de educación para la prevención.
Gran Canaria y colaboración
El presidente de la Junta lanzó un mensaje de solidaridad con la isla de Gran Canaria, que sufre aún un devastador incendio que ha calcinado ya 10.000 hectáreas, aunque remite favorablemente. Al respecto, tuvo palabras de recuerdo para una “representación de Castilla y León” en el Archipiélago, concretamente una brif de Tabuyo del Monte (León), del Ministerio de Agricultura. “Nos representa a todos los castellanos y leoneses en dos ideas. Por un lado, nuestra solidaridad con la gente de Canarias que sufre este incendio. Y en segundo, el compromiso claro e inequívoco de la Junta y de la inmensa mayoría de la sociedad regional, de nuestra apuesta clara y lucha contra incendios forestales”, afirmó.
Al respecto, subrayó la “excelente” coordinación con otras administraciones públicas, desde el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente a la Unidad Militar de Emergencias (UME), pasando por todas las entidades locales.
En este sentido, ensalzó la apuesta “clara” de la Junta con un “patrimonio natural impresionante y magnífico en la Comunidad”. “En cualquier provincia que vayamos lo podemos comprobar. Somos una potencia natural en toda España y debemos sentirnos profundamente orgullosos. No sólo por la riqueza medioambiental, sino porque los montes generan riqueza económica, creación de empleo y fijación de población en el medio rural. Y por ello tenemos que cuidar la superficie forestal, mimarla y seguir mejorándola en el futuro”, espetó Mañueco, quien también se refirió a la relevancia de la educación ambiental.
Igualmente, apostó por “seguir limpiando los montes para que se vean como proyecto económico y ambiental, que permitan la utilización de biomasa como algo que genera empleo y valor añadido”.
Situación actual
En lo que llevamos de año se han originado en torno a 1.300 incendios en Castilla y León, un 18 por ciento menos respecto a la media de los últimos 10 años. Esta situación “aparentemente favorable”, y de la que adelanto algunos datos el vicepresidente, portavoz y consejero de Transparencia, Francisco Igea, el pasado lunes, se debe a la “buena evolución” que han tenido los incendios en el noroeste de la comunidad, en las provincias de León y Zamora, mientras que en las provincias del sur, especialmente en Ávila y Segovia, el año está siendo “especialmente complicado”. En este momento, el riesgo de incendios es alto, por lo que la Junta abogó por “seguir extremando la precaución en todas las actuaciones que se realizan en el medio natural”.
El operativo de incendios de Castilla y León
Coincidiendo con las épocas de peligro alto, en 2019 el operativo de la Junta de Castilla y León de prevención y extinción de incendios está integrado por 4.544 profesionales (entre ingenieros, agentes, celadores, trabajadores de cuadrillas helitransportadas, de tratamientos selvícolas, tripulación de medios aéreos y retenes de maquinaria…) para defender el bosque, distribuidos en el territorio en diez centros de mando operativos todo el año.
En cuanto a medios materiales terrestres, el dispositivo cuenta con 215 puestos y cámaras de vigilancia, 313 autobombas, 201 cuadrillas terrestres y helitransportadas, 29 retenes de maquinaria y bulldozer cortafuegos; asimismo se cuenta con 21 helicópteros como medios aéreos distribuidos en las diferentes bases de la Comunidad. Este dispositivo cuenta en muchas ocasiones con la colaboración de medios aéreos del Estado distribuidos en Castilla y León.
El presidente también hizo hincapié en la necesaria tarea de prevención de incendios. Al respecto, la Junta anunció el refuerzo y actualización del ‘Plan 42’, en el que ya se está trabajando.