El 52 por ciento de los españoles prefiere a sus mascotas antes que a los seres humanos, según un estudio realizado por Amazon sobre los comportamientos y actitudes de dueños de mascotas en España.
El estudio destaca que las personas que tienen mascotas admiten que harían cualquier cosa para satisfacer las necesidades de los animales. De esta manera, el 49 por ciento reconoce que ha cambiado sus planes de vacaciones para poder llevarse a sus mascotas, a las que el 67 por ciento se refiere a ellas como «bebé» o «hijo».
En todo caso, uno de cada tres de los encuestados (36%) afirma que ha tenido que comprar muebles nuevos y uno de cada seis (18%) confiesa que sobrelleva alguna alergia por tener animales. Además, la investigación ha determinado que casi el 60 por ciento cree que las empresas deberían conceder días de permiso por fallecimiento de mascota, mientras que el 29 por ciento considera necesario que haya un permiso de paternidad cuando la mascota tiene cachorros.
En relación con el gasto medio, los españoles dicen gastar cerca de 45 euros al mes en sus animales. De hecho, un 21 por ciento ha declarado que se gasta más en peluquería para su mascota que para sí mismo y el 20 por ciento ha abierto alguna cuenta en redes sociales para sus animales.
Por último, el estudio concluye que este tipo de relación aporta beneficios tanto para la persona como para el animal. Los dueños de mascotas creen, de manera casi unánime (86%), que tener una mascota contribuye a mejorar su salud mental y el 87 por ciento considera que sus animales son capaces de tener emociones humanas.
Los europeos prefieren los gatos, los españoles los perros
Un 25% de los hogares europeos tiene gatos, frente a un 24% que tiene perros, una tendencia muy distinta a la de España en la que hay el doble de familias con canes que con félidos.
La Federación Europea de la Industria de la Alimentación de Animales de Compañía (Fediaf) explica que se sigue manteniendo la tendencia del aumento del número de gatos en Europa que alcanzan los 75,3 millones, que siguen superando ligeramente a los perros —como ya ocurría en 2017—, que reducen su número hasta los 65,5 millones.