Casi seis de cada diez castellanos y leoneses se han mostrado dispuestos a ahorrar más y gastar menos de lo que lo hacían antes de la crisis generada por la pandemia del COVID-19. Así se desprende de una encuesta elaborada por el Instituto BBVA de Pensiones que pretende analizar el impacto de la pandemia en las perspectivas del ahorro y jubilación en España. En concreto, según este estudio, fueron el 58 por ciento de los castellanos y leoneses encuestados los que reconocieron tener esa intención, siete puntos por encima del conjunto nacional, que fue del 51 por ciento.
La encuesta se realizó a una muestra representativa de la población española de 2.045 personas mayores de edad a quienes se preguntó entre el 27 de mayo y el 13 de junio por su situación durante el confinamiento y por sus expectativas de ahorro a raíz de la crisis. El 65 por ciento de los encuestados afirmó haber gastado menos durante el periodo de confinamiento entre marzo y abril, frente al 61 por ciento en España.
Además, el 69 por ciento de los encuestados en Castilla y León afirmó haber ahorrado algo en este periodo, frente al 57 por ciento nacional, con un importe ahorrado algo menor que la media nacional, ya que fue de 341 euros frente a los 368 en España. En la fase de desconfinamiento, el 33 por ciento de las personas encuestadas dijo haber gastado menos, en línea con la media nacional, que fue del 34 por ciento, mientras que los que consiguieron ahorrar en este periodo fueron el 61 por ciento en Castilla y León, frente al 49 por ciento en España. La cifra media de ahorro alcanzó los 313 euros frente a la media nacional de 299 euros.
Asimismo, en torno a uno de cada cuatro entrevistados en Castilla y León han comenzado a ahorrar para la jubilación, para lo que un 31 por ciento emplean planes de pensiones o de empresa (frente al 61 por ciento en España) y depósitos o libretas de ahorro en un 35 por ciento (28 por ciento la media nacional), mientras que un 20 por ciento recurren a otras vías.
Por su parte, el 79 por ciento de los castellanos y leoneses que reconoce no haber empezado a ahorrar para la jubilación entiende que es conveniente hacerlo, en especial a partir de los 34,1 años frente a la media nacional que estima que el momento idóneo es a partir de los 37 años. El porcentaje de pensionistas residentes en Castilla y León que temieron durante el periodo de crisis por el pago de la pensión es del 28 por ciento frente al 35 por ciento de la media nacional. También es inferior (51 por ciento) el número de personas de Castilla y León a quien no extrañaría que se congelaran las pensiones en los próximos años, frente al 59 por ciento de la media nacional.