Los alumnos del Colegio Claret no quisieron terminar el año sin realizar su tradicional visita a la Residencia de la Hermanitas de los Pobres.

Aprovechando la visita, los alumnos mayores del centro escolar trasladaron los alimentos y el resto de productos de primera necesidad, que fueron recogidos en el colegio a lo largo de las dos últimas semanas, dentro de la Operación Kilo. Esto ha reportado varios centenares de artículos que podrán ayudar a mitigar las necesidades de los mayores acogidos en esta institución católica.

Segosala, solidario con los afectados por la DANA

Las religiosas pudieron dirigirse al alumnado claretiano al inicio de la campaña, para informarles de la situación de su labor con los ancianos de nuestra capital. Desde entonces, estos alumnos fueron depositando de forma diaria aquellas aportaciones que, entendieron, mejor podrían satisfacer la demanda de estas Hermanitas de los Pobres.

Tras esta entrega, llegó el turno de otros alumnos más jóvenes, en este caso de la ESO, que interpretaron un repertorio centrado en los villancicos tradicionales. Supuso en momento de recuerdo para los residentes.

Además, queda como principal aportación el intercambio generacional que supone que los alumnos y los mayores alojados en la residencia intercambien sus inquietudes y vivencias, rompiendo, durante un tiempo, con la rutina diaria y mostrando un respeto y agradecimiento explícito por cuanto, cada uno de ellos, puede ofrecer.