Ver televisión es uno de los pasatiempos más importantes y de mayor influencia en la vida de niños y adolescentes. Los menores en Estados Unidos están sentados frente al televisor un promedio de tres a cuatro horas diarias. Para el momento en que se gradúan del colegio habrán pasado más tiempo viendo TV que en la sala clases.
Aunque la televisión puede entretener, informar y acompañar a los niños, también puede influenciarlos de manera indeseable. El tiempo pasan frente a ella les impide realizar actividades importantes, como la lectura, el trabajo escolar, el juego, la interacción con la familia y el desarrollo social.
Las niñas de entre 3 y 13 años pasan más horas delante del televisor que los niños de esa misma franja de edad. Mientras que el consumo diario de televisión alcanza entre las chicas los 102 minutos de media, se queda en los chicos en tan sólo 95 minutos. Así se desprende de estudio desarrollado en Alemania por Media Control, informa Horizont.
Según el informe, para el cual se han utilizado datos correspondientes a los últimos tres meses, los niños prefieren los fines de semana (sábados con una media de 129 minutos diarios y domingos con una media de 121) y los viernes (107 minutos de media) para ver la televisión.
Para la realización del estudio se ha tenido en cuenta un público potencial de alrededor de 7,1 millones de niños con edades comprendidas entre los 3 y los 13 años.