La ministra de Educación y Formación Profesional del Gobierno de España, Pilar Alegría, descartó hoy en Valladolid la posibilidad de retirar la obligatoriedad del uso de las mascarillas en los espacios al aire libre dentro de los colegios y centros educativos del país porque “no podemos dar pasos atrás”.
En declaraciones a los medios antes de su participación en la clausura de la primera jornada ‘FP Talks’, organizada por la Fundación Empresa Familiar en Castilla y León, Alegría señaló que las medidas que se establecieron “están dando unos buenos resultados y están permitiendo disfrutar de unos entornos educativos seguros”.
Por ello, aseguró que aunque se tengan “cifras optimistas” a nivel epidemiológico, hay que continuar con las medidas porque “están dando buenos resultados” y dado que “por el momento, la prudencia tiene que seguir siendo nuestra principal consejera”.
Así, y ante la petición de algunas comunidades autónomas para retirar la obligatoriedad de la mascarilla en los espacios abiertos dentro de los centros escolares, Alegría recordó que las medidas adoptadas, relativas al uso de la mascarilla, el lavado de manos y el distanciamiento social, “fueron consensuadas por todas las consejerías con el Ministerio” y además “están funcionando bien”, por lo que se mostró partidaria de “seguir siendo prudentes y continuar con las mismas medidas”.
“Aunque todos nos podemos alegrar responsablemente de que la situación es mucho más favorable, no podemos abandonar la prudencia que nos ha posibilitado hoy disfrutar con mayores garantías”, continuó esgrimiendo ante los medios la ministra de Educación, recordando que “en estos momentos, en nuestro país hay más de 400.000 aulas y el nivel de confinamiento no llega ni al 0,005 por ciento”, por lo que aunque los datos sean “más favorables que los que teníamos hace un tiempo”, se impone la “prudencia” y el uso obligatorio de la mascarilla se mantendrá en los centros educativos.
Vacunación en los colegios
También se refirió la ministra de Educación a la posibilidad de que, una vez la EMA apruebe el uso de las vacunas contra el COVID-19 en menores de 12 años, se pueda desarrollar la campaña de vacunación en los propios centros educativos, mostrando cautela al señalar que hay que ir “paso a paso” y que debe ser primero la EMA “la que dé el pistoletazo de salida”.
“A partir de ahí, coordinación absoluta entre las autoridades sanitarias y educativas” para, cuando se adopte dicha decisión sobre la vacunación a los menores de 12 años, se vayan viendo “el resto de cuestiones”.
“Estamos ante una situación de crisis sanitaria y son las autoridades sanitarias las que van marcando el camino”, esgrimió Alegría, apuntando que “una vez que se tomen ese tipo de decisiones, por parte del ámbito educativo se colaborará como se ha hecho siempre”.
Un colectivo, el de los miembros de la comunidad educativa española, al que Alegría dedicó palabras de reconocimiento señalando que “nunca serán suficientes las muestras de agradecimiento” por su comportamiento durante un curso, el pasado, en el que “la incertidumbre fue la tónica habitual” y, a pesar de ella, “la comunidad educativa ha dado una lección”, permitiendo que los jóvenes “tuvieran acceso a ese derecho esencial, como es la educación, en un entorno seguro”.