Con la grabación durante este confinamiento, la Ronda Segoviana culmina los ensayos de ‘Lágrimas negras’, una hermosa pieza cubana

Hace más de 39 años, un grupo de entusiastas del folklore coincidimos en la necesidad de crear un grupo que al estilo de las tradicionales rondas de mozos, reverdeciera los cantos de Castilla, estuviera presente en las fiestas de nuestros pueblos y llevara, divulgando las coplas tradicionales segovianas y castellanas, donde se reclamara nuestra presencia. Con esta idea nació el 4 de Septiembre de 1976, el grupo folklórico Ronda Segoviana, con motivo de la celebración de la «Catorcena» del barrio de San Martín, siendo su principal impulsor y artífice José Diviú Estades más conocido como “Pepe Diviú”, el cual reunió a su alrededor, junto al atrio de San Martín y a los pies de la estatua del comunero Juan Bravo, a un grupo de jóvenes y menos jóvenes, algunos con más conocimientos musicales y otros con menos, pero todos con ganas de divertirse y con un espíritu siempre joven, los cuales de forma decidida lanzaron e impulsaron está idea que día a día, semana a semana, mes a mes y año a año han alcanzado y han llegado 39 años después hasta el presente 2016. Sin duda, los años han pasado, y de que manera, pero lo que no ha pasado ni ha caducado ha sido su espíritu joven y sus ganas de divertirse y seguir divirtiendo a quien les escucha. La Ronda Segoviana en sus años de existencia ha llevado la música tradicional de Segovia y de Castilla y León, haciéndola si cabe más universal, a lo largo y ancho de toda nuestra provincia de Segovia, de toda nuestra Comunidad Autónoma de Castilla y León, de numerosos lugares y puntos diferentes de España, y ha traspasado incluso nuestras fronteras nacionales promocionando Segovia y sus tradiciones musicales en distintas capitales y pueblos de Francia. Contando en la nómina general de sus componentes y a lo largo de estos 39años con más de 150 personas que pertrechados bajo sus capas castellanas y con sus bandurrias, laudes, guitarras, percusiones y voces, en mayor o menor medida, han dejado su huella, su buen hacer, su sabiduría musical y de vida y han compartido intensamente tantos y tantos bellos momentos, siempre alrededor de nuestras músicas populares y de nuestra cultura más tradicional. Vaya hacia todos ellos nuestro más querido reconocimiento. Desde aquella inicial andadura la Ronda Segoviana ha estado presente en un sin fin de sitios, y en los escenarios y lugares más dispares, desde el remolque de un tractor, plazas, patios, jardines, teatros, claustros, hospitales, residencias de ancianos, cuarteles militares, plazas de toros, escalinatas, iglesias, cárceles, etc., hasta completar un total aproximado de 1.800 actuaciones, en las que públicamente ha dado todo lo que hemos recogido y recuperado de nuestro folklore, con una innumerable variedad de melodías y estilos, tales como fandangos, romances, seguidillas, misas, tonadas, cantos de trabajo, villancicos y sobre todo nuestras muy populares jotas en sus más variados estilos y formas.