La Consejería de Medio Ambiente prevé implantar 10.000 megavatios de producción de energía eólica a largo plazo basado en instalaciones de gran potencia, así como fomentar la microgeneración, según se extrae de la Estrategia Regional de Desarrollo Sostenible 2009-2014.
Se trata de una de las apuestas más relevantes del Gobierno regional en dicho documento que se desarrollará durante los próximos años, a la que se suma otra importante a corto plazo como es buscar el impulso de la energía solar térmica en general, y en edificios e instalaciones no obligados por el código técnico en particular, con el objetivo de disponer como mínimo de 265.000 metros cuadrados de captadores solares para el año 2010.
Dentro de la Estrategia, la Junta prestará especial atención al fomento de las energías limpias. Así, además de las dos medidas anteriores, favorecerá durante estos ejercicios la implantación de plantas eléctricas de pequeño y medio tamaño (eólicas, minihidráulicas y biomasa, entre otras) con uso de calor excedentario; potenciará la implantación de este tipo de energías renovables para el abastecimiento de los edificios y dependencias de la Junta -donde también incorporará criterios de arquitectura bioclimática y sostenible-; incentivará modelos empresariales de gestión energética que faciliten la externalización en industrias, empresas e instituciones mediante el sistema de empresas de servicios energéticos; fomentará diagnósticos y proyectos municipales sobre la viabilidad del aprovechamiento de recursos endógenos a escala local; e incrementará y publicitará los puntos de adquisición de equipos de energías renovables y combustibles para los mismos.
Fuentes de la Consejería de Medio Ambiente se plantean como reto “conseguir que con el mismo presupuesto que hasta ahora, todos los departamentos intenten desarrollar las mismas acciones pero de forma más eficaz con los medios que hay disponibles en la Comunidad para alcanzar esta excelencia”.
Para ello, es necesaria una apuesta del sector privado, como por ejemplo en la energía eólica, cuyas empresas “están por la labor”, aunque ahora están frenadas por la legislación gubernamental.
Otro de los aspectos donde también se desarrollarán numerosas acciones es la materia hidráulica, donde la Estrategia recoge análisis de las posibilidades de almacenamiento de energía de origen renovables en saltos de agua mediante sistema de bombeo-turbinación e incentivar el uso de la geotermia al respecto.
Cultivos energéticos
Otro de los apartados que la Consejería de Medio Ambiente considera importante es la obtención de estas energías a través del sector agrario. En ese sentido, se fomentará el desarrollo de cultivos energéticos viables, con formación hacia los profesionales del campo para fomentar su participación como proveedores de biomasa o propietarios de plantas de transformación. Y se potenciarán las energías renovables desde el punto de vista de la reducción de los gases de efecto invernadero (GEI) en las industrias agroalimentarias, todo ello supervisado por el Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl).
Para poder llevar a cabo muchas de estas medidas la Junta ha pensado en una curiosa idea como es crear una ‘escuela de alcaldes’, desarrollada en el marco de los programas de educación ambiental del Gobierno regional, como forma de integrar la sostenibilidad al máximo nivel de toma de decisiones en el ámbito municipal.
Por otro lado y en materia de eficiencia y ahorro energético, la Estrategia prevé nuevos planes de renovación de electrodomésticos, dar continuidad al de calderas domésticas, sustituir monitores informáticos por pantallas LCD, así como un plan renove para los tractores agrícolas que incluiría un incremento de los porcentajes de subvención para aquellos modelos que sean más eficientes energéticamente.
Movilidad y transporte
Otro de los capítulos a los que la Consejería presta especial atención es a la movilidad y el transporte, ya que el objetivo es fomentar el desarrollo y uso de vehículos y combustibles limpios y medidas de apoyo a la implantación de los mismos por las carreteras y calles de Castilla y León. Así, se impulsarán proyectos de I+D+i y acuerdos con fabricantes de automóviles, aspecto donde cobra mayor importancia la implicación de Renault con su vehículo eléctrico.
La Estrategia también recoge el compromiso de que las administraciones públicas adquieran un número de este tipo de vehículos, que supongan al menos un 10 por ciento de sus flotas en 2012. También se estudiará el aprovechamiento del gas natural y del biogás.
Se apoyará la ejecución de planes urbanos de movilidad sostenible para todas las aglomeraciones urbanas de Castilla y León con el objetivo de fomentar el transporte público. Esto incluye, como medidas novedosas, planes concretos para hospitales, promover ‘zonas de tráfico calmado’ y ‘zonas cero’, con especial incidencia en entornos de centros escolares, analizar la viabilidad de metro ligero o tranvía para las cercanías. También se pretende aumentar, en colaboración con Renfe y Feve, la participación del ferrocarril en el transporte interurbano y extender el transporte a la demanda.
En cuanto a las mercancías, el Ejecutivo presidido por Juan Vicente Herrera incrementará la participación ferroviaria y el número de estaciones intermodales, así como planificar plataformas logísticas en los principales enclaves de la Comunidad, con prioridad para aquellas que garanticen, precisamente, el acceso al ferrocarril. Aunque desde Castilla y León suene lejano, la Estrategia también prevé la elaboración de un plan de promoción de la intermodalidad marítima para facilitar las exportaciones e importaciones de las empresas regionales.
Desde la Junta consideran vital que en un decenio descienda de manera considerable el uso de recursos fósiles para el movimiento de los vehículos y, en ese sentido, recuerdan que cobra mucha importancia la promoción del coche eléctrico que, por ejemplo, Renault fabricará en Valladolid
Recursos naturales
Como no podía ser de otra forma, también se contemplan medidas para la conservación y mejora de los recursos naturales y la biodiversidad, que en la Comunidad son muchos. Entre las propuestas que se incluyen se encuentra el desarrollo de una línea de ayudas para avanzar en la coexistencia de determinadas especies con los usos humanos
-principalmente los agrarios-; la lucha contra el uso de veneno; desarrollar las medidas contempladas en el Plan de Gestión del Lobo; una Estrategia conjunta con Iberdrola relativa a los tendidos eléctricos y su afección a la avifauna; y bancos de germoplasma con las especies de flora representativas de la región.
Para una gestión segura de los productos químicos y sustancias peligrosas, la Consejería impulsará un programa regional de sustitución de materias primas no renovables derivados del petróleo y la química, como los bioplásticos, por energías renovables. También se eliminará progresivamente el uso de disolventes mediante la mejora de los procesos industriales, reducir las emisiones de gases fluorados en la industria, racionalizará el uso de plaguicidas y elaborará un programa de mejora continua de las plantas de tratamiento de residuos a través de la incorporación de las mejores técnicas disponibles.
Por último, con el fin de buscar una nueva visión del bienestar y una sociedad más saludable y solidaria, se prevé el impulso de actuaciones integrales de mejora de barrios periféricos y zonas marginales que permitan la integración de estas zonas en el núcleo urbano y terminen con el aislamiento de su población, así como elaborar un programa de ‘viviendas saludables’ en el que se estudie la incidencia en la salud de las técnicas y materiales de construcción. Si 2009 fue un año para conocer las medidas demostrativas, según la Consejería, 2010 lo será para que la Administración autonómica “de ejemplo” a los ciudadanos y opte por la implantación de energías limpias, eficientes y ahorrativas, e integra variables medioambientales para mostrar el camino a seguir al sector privado.