La Junta de Castilla y León ha destinado a día de hoy un total de 33,7 millones de euros en la compra y transporte de equipos de protección y que permitido repartir 31,35 millones de unidades de equipos de protección tanto al ámbito sanitario, como al sociosanitario,
La previsión presupuestaria hasta diciembre de 2020 para la adquisición de estos materiales de protección individual que asciende a 56,3 millones , con lo que el gasto total en EPIs para este año se elevaría a 90 millones de euros.
En su comparecencia a petición propia ante la Comisión de Sanidad de las Cortes para informar de la evolución y medidas en relación con la Covid-19, que comenzó con un minuto de silencio por las personas fallecidas por este virus, la titular de este departamento, Verónica Casado, ofreció ese dato y subrayó que la protección de los sanitarios ha sido desde el inicio una de sus máximas preocupaciones.
Además, explicó que se ha facilitado incluso a farmacias e industria esencial durante las semanas de mayor confinamiento. En total, señaló el reparto 13.853.220 mascarillas quirúrgicas, 2.601.287 FFP2, 477.408 FFP3, 11.380.355 guantes, 767.299 batas, 360.511 monos, 273.983 gafas, 341.434 pantallas de protección facial, 459.570 calzas o 75.965 botes de gel hidro-alcohólico, entre otros.
Casado detalló el material que tenían en febrero pero afirmó que ya sabían que no iba a ser suficiente y precisó que el 9 de marzo se solicitó equipos al Ministerio, como 14.000 mascarillas FFP2, 7.000 mascarillas FFP3 y 12.000 mascarillas quirúrgicas.
Con la declaración del estado de alarma, el 14 de marzo, el Ministerio de Sanidad asume el mando único y el 17 autoriza a las comunidades a formalizar compras, y Castilla y León lo hace un día después.
En estas semanas se han realizado, entre otras, las compras de equipamiento clínico con una inversión superior a los 4,5 millones de euros que, en cuanto se recibe, es distribuido entre los distintos hospitales de nuestra comunidad, en función de las necesidades manifestadas por cada uno de ellos.