Ayer por la mañana daba comienzo en los campos de La Faisanera Golf una nueva etapa para el deporte de la provincia con la inauguración de la primera Escuela Provincial de Golf promovida por la Diputación. Bajo la atenta mirada del presidente de la institución provincial, Miguel Ángel de Vicente, los primeros quince alumnos –de un total de cuarenta y uno-, procedentes, tanto de la capital como de La Lastrilla, Navafría y San Cristóbal de Segovia, agarraban los palos y se disponían a recibir las primeras lecciones de manos de los profesores de La Faisanera.

“Para la Diputación comienza un proyecto ilusionante”, afirmaba De Vicente, quien acto seguido añadía que “llevábamos tiempo estudiando las condiciones para poner en marcha esta Escuela, ya que consideramos que La Faisanera, no sólo por la calidad de sus instalaciones, sino también por el entorno en el que está ubicado, es un campo idóneo para enganchar a los segovianos a un deporte como éste”. El presidente de la institución provincial, además, apuntaba que, al igual que sucede con el pádel, que gracias, entre otros factores, al impulso del Circuito Provincial de Pádel por parte de la Diputación, ha experimentado una notable evolución entre los segovianos amantes del deporte, “el golf es una disciplina que puede ser practicada al mismo tiempo por personas de diferentes edades, lo que facilita que familias enteras puedan participar de forma conjunta en una misma actividad de ocio”. No en vano, esta primera Escuela promovida desde la institución cuenta, entre su cerca de medio centenar de alumnos, con cinco menores, quienes, al igual que el resto de inscritos, tendrán una clase semanal de una hora.

El programa de verano de la Escuela, que cuenta con un presupuesto de 15.700 euros, de los cuales 12.200 son aportados por la Diputación y 3.500 por los alumnos en concepto de cuotas de matriculación (75 euros por adulto y 25 euros por niño), se prolongará hasta el próximo 29 de septiembre, habiendo quedado las clases de los adultos -procedentes también de Palazuelos de Eresma, Cantimpalos y el Real Sitio de San Ildefonso- divididas en un grupo de quince, dos grupos de nueve y uno de tres alumnos, en función de los niveles. Éstas, al igual que la clase de los menores, serán impartidas a lo largo de las jornadas de los martes.

Antes de dejar al grupo recibiendo las primeras instrucciones para dar inicio a la clase, Miguel Ángel de Vicente esperaba “que los alumnos disfruten de este nuevo proyecto y que la experiencia sea tan buena que se la transmitan a amigos, compañeros y familiares, de forma que poco a poco el golf vaya teniendo más presencia en nuestra provincia, ya que pocas regiones pueden presumir de contar con unas instalaciones como éstas”.