En barco desde Segovia, con los ‘jetboat’ que construye una consolidada empresa a 350 kilómetros del mar, en un pueblo de Segovia de poco más de mil habitantes.
Con más de 20 años de experiencia, la empresa Barcos de Aluminio, S.L., ubicada en el Polígono de Valverde del Majano, en la provincia de Segovia, construye barcos de aluminio.
Referente desde 2004
La fábrica de barcos de aluminio Moggaro nació en 2004, como un pequeño astillero en plena Campiña Segoviana.
Sin embargo, a más de 350 kilómetros de la costa más próxima, se ha convertido en un referente naval mundial.
De hecho, el astillero segoviano es el único que fabrica en Europa la lancha rápida, ‘jetboat’. Lo pusieron en el mercado en 2008.
“Ya entonces pensábamos que iba a ser un boom, pero la crisis pegó como pegó y en cuatro años vendimos sólo cinco”, recuerda Santiago Parga, creador de este proyecto de negocio.
Sin embargo, el grifo del crédito empezó a abrirse en 2012 y el barco turístico de alta velocidad se sumó al atunero para rescatar el negocio, con el valor añadido de su proyección internacional.
El ‘jetboat’ se convirtió entonces en la base del negocio.
Del AVE de Valladolid a construir barcos en la provincia de Segovia
Fue Santiago Parga, ingeniero de caminos bilbaíno que trabajaba en las obras del AVE a Valladolid, el que tuvo la peculiar ocurrencia de montar esta peculiar fábrica.
Concurrían, además, dos circunstancias muy especiales. Por un lado, porque se propuso construir barcos de aluminio cuando en España apenas se conocía la aplicación naval de este material como alternativa a la clásica fibra. Y, por otro, por hacerlo en una provincia de interior.
“Dio la coincidencia de que tuve una reunión con empresarios del polígono por mi trabajo en la línea ferroviaria”, recuerda en una entrevista recogida por ical. “Arturo de Pablos me dio su tarjeta, vi que era calderero, le propuse probar, funcionó y aquí seguimos”.
«Lujo exótico»
Entonces, apuntaba también que «el cliente que demanda barcos de aluminio es muy especial y al principio se mostraba reacio». No obstante, el hecho de estar en Segovia ha resultado ser un atractivo más, un lujo exótico venir a comprar barcos a Segovia.