El presidente de la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León (Cecale) y de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), Jesús Terciado, aseguró que “en no muchos meses” tendrá que producirse “una segunda reforma laboral” dirigida, esta vez, a favorecer la “contratación”, ya que “un marco laboral no puede tener sólo la referencia del despido, sino que debe facilitar la contratación y el Real Decreto aprobado no es suficiente”, dijo.
Terciado, quien participó en ‘Los Desayunos de Ical’, un formato que reúne a representantes de la vida económica de la Comunidad con directivos y periodistas del grupo Promecal, aseguró que el Gobierno no dulcificará la reforma aprobada, porque “sigue teniendo la sombra de los mercados internacionales a sus espaldas” y modificar las causas objetivas de despido “no tiene mucho sentido” y cree que “no se puede hacer”.
Jesús Terciado comentó que la reforma actual “va a flexibilizar y hacer más posible la adaptación de las empresas en etapas de crisis, los expedientes de regulación de empleo y los despidos objetivos, pero no profundiza en las nuevas fórmulas de contratación”. Al respecto, reclamó un sistema de contratación “claro y sencillo” y abogó por la generalización del contrato de fomento del empleo, como “contrato laboral de base que utilicen las empresas a partir de ahora para hacer a sus trabajadores fijos”.
Acuerdo social
Terciado analizó el acuerdo social firmado por el Gobierno, los sindicatos y las organizaciones empresariales, del que él mismo fue protagonista, y aseguró que fue posible por el cambio del “afán conservador” del Ejecutivo a una actitud “reformista” ante el castigo de los mercados internacionales. Asimismo, expresó que este acuerdo fue consecuencia “directa” del fracaso de la huelga general que hicieron los sindicatos en septiembre. “El primer paso lo dio el Gobierno y los sindicatos le siguieron ante su falta de vigor en la convocatoria de huelga”, dijo, para justificar también la mejora del clima en la nueva dirección de la patronal, con su Presidencia de Cepyme y la de Joan Rosell de CEOE.
El presidente de la patronal de la pequeña y mediana empresa se felicitó por el acuerdo social, con la reforma de las pensiones que, aunque no era un asunto “esencial” para los empresarios más allá de la sostenibilidad del sistema, según dijo, permitió mejorar mucho las relaciones entre las partes. “Los sindicatos pasan de posturas inflexibles a otras más flexibles y el Gobierno cataliza, no impide el acuerdo, lo que ocurría en los años anteriores. Es un cambio radical”, sentenció.
En este sentido, se detuvo en las negociaciones bilaterales que se desprenden ahora con las centrales sindicales dentro del acuerdo social, sobre todo en lo que se refiere a la negociación colectiva. “En la reforma laboral y la negociación colectiva nos va el futuro y nos vamos a emplear a fondo”, dijo, para asumir que las posturas de las partes en la actualidad son “bastante divergentes” y la dificultad con la que se encuentran ahora “es mayor que la de antes, por lo menos por nuestra parte”.
Salarios y productividad
Aún así, comentó que “a lo mejor” son capaces de “acercar esas líneas y alcanzar un acuerdo” y tanto la patronal como los sindicatos intentarán cumplir el plazo marcado por el Gobierno para cerrar una reforma del sistema el 18 de marzo. “No pasa nada si estamos negociando 15 días más, pero si no somos capaces de llegar a un acuerdo lo vamos a saber antes”, añadió.
Jesús Terciado explicó que en materia de negociación colectiva las cartas están sobre la mesa tras la propuesta lanzada por la canciller alemana Ángela Merkel y su reto es lograr un modelo ligado a la productividad aunque tuviera “ciertas referencias” al IPC. En este sentido, reconoció que esta negociación les va a costar mucho a ambas partes, porque en esta materia sus líneas “amarillas” (no quiso decir rojas) “están bastante distanciadas”.
El responsable empresarial comentó que la idea es que nunca suban los salarios por encima de la productividad, y que si la actividad crece, éstos se eleven, y si decrece, que se produzca un ajuste salarial, en jornada u horarios. “Tenemos un sistema tan rígido que se ajusta por despidos y no por salarios, jornadas u horarios. Es la dificultad que tenemos y el objetivo es establecer un amplio marco de medidas que permita que haya más flexibilidad en la empresas para adaptarse a las situaciones difíciles”. En este sentido, reconoció que para reclamar estas medidas las empresas deben ser transparentes y capaces de demostrar que sus números son reales.
Convenios territoriales
Jesús Terciado criticó el debate sobre la estructura territorial de la negociación colectiva de PP y PSOE y defendió que “el problema es de contenidos no de estructura territorial, ya que puede ser tan competitiva una negociación en una provincias como en una empresa como en una región o en un país”. Al respecto, insistió en la necesidad de garantizar la libertad de las partes, porque “cada sector y cada territorio debe elegir su modelo”. Agregó que son los sindicatos los que no están de acuerdo con el marco actual, porque prefieren una negociación nacional antes que provincial y sino regional, porque al final “su capacidad de presión es mayor”.
El presidente de Cecale y Cepyme también manifestó que los convenios colectivos adolecen de dos problemas que son básicos para que ganen en competitividad, uno es la ultractividad, “con la que hay que acabar” y otro son los descuelgues, “que hay que facilitar”. “¿Cómo se mejora la competitividad?, se preguntó, “hay muchos elementos, pero es muy difícil si la vigencia de un convenio sigue eternamente hasta que se negocie otro porque eso nos obliga a negociar y no a acordar”. Por ello, planteó que se establezca un límite de tres a cinco meses para alcanzar un nuevo acuerdo cuando ya ha finalizado el anterior. “Para nosotros es fundamental acabar con la ultraactividad, como lo es que la posibilidad de descuelgue del convenio sea normativa básica y vaya más allá de lo que dice un convenio concreto”, señaló.
Para finalizar su análisis de este asunto, aseguró que la negociación colectiva se está desarrollando con normalidad a pesar del debate actual y el porcentaje de convenios acordados “no ha cambiado con respecto a años anteriores a pesar de la crisis”. En este sentido, opinó que “ha ayudado mucho el acuerdo nacional que se firmó en 2009 para los tres años, 2010, 2011 y 2012 y esa referencia ha servido para estabilizar convenios”. “Las unidades de convenio son absolutamente autónomas y a lo mejor no hay la velocidad de otros años porque se está pensando una posible reforma, pero no hay ninguna directriz para que los convenios aguanten, eso no es cierto”, profundizó.
Políticas activas
El máximo responsable de Cepyme también se detuvo en el acuerdo sobre políticas activas de empleo y subrayó que “es fundamental diseñar herramientas para que la empresa se anime a contratar”, dijo. Al respecto, se congratuló del acuerdo para impulsar la contratación temporal de 100.000 jóvenes y parados de larga duración, con bonificaciones en la Seguridad Social del 100 por ciento para pymes y del 75 por ciento para grandes empresas, con la posibilidad de trasformar esos contratos en fijos con otra bonificación. “Eso es lo que necesitamos en España”, dijo. Asimismo, apostó por generalizar la reducción de las cuotas de la Seguridad Social en cinco puntos.
Terciado sustanció que ahora su planteamiento es que se apoye a las empresas a contratar a cualquier trabajador, sin diferenciar colectivos, porque toda la sociedad está sufriendo la crisis por igual. Eso unido, dijo, a una serie de políticas de formación continua y de reciclaje, que son “fundamentales”, junto a la apertura del modelo de intermediación laboral de los sistemas públicos de empleo, que “han tenido muy poca capacidad” para buscar trabajo y “van a funcionar mejor ahora con la pata privada”.
Castilla y León
Por último, Terciado habló sobre la situación del mercado laboral de la Comunidad y aceptó que “Castilla y León ha resistido mejor a la crisis”, ya que “aquí ha habido una menor sectorialización hacia el mundo inmobiliario”. El presidente de Cecale también justificó este mejor comportamiento de la región, en las políticas de competitividad, de empleo y de protección social acordadas en el seno del Diálogo Social. “Un marco negociado entre agentes económicos y sociales y una estructura distinta a otras autonomías ha permitido tener mejores cifras”, dijo.
El responsable de la patronal regional reconoció que históricamente Castilla y León “reacciona más tarde” que el resto de España, tanto en creación como en destrucción de empleo. Sin embargo, dejó claro que “aventurar que el resto de España va a contener su crecimiento del desempleo y que Castilla y León va a seguir creciendo hasta alcanzar el 20 por ciento, yo no lo veo”. Finalizó afirmando que en esa evolución, las cifras de paro se pueden acercar “un poquito en un momento determinado” pero “si a nivel nacional el paro se estanca, en Castilla y León se quedará más o menos en estas cifras, y si se reduce, también disminuirá en Castilla y León”.