Las artes, la pintura y la escultura. Felipe V junto a su segunda esposa, la aristócrata italiana Isabel Farnesio, crearon una colección que supera ampliamente el millar de obras. Su retiro de verano, el espectacular Palacio Real de La Granja (Segovia), abre mañana al público una nueva museografía para relanzar la visita cultural con una mayor coherencia histórica, además de reordenar colecciones y el estreno de 47 obras nuevas.

Según el conservador de Pintura del siglo XVIII de Patrimonio Nacional, Javier Jordán de Urríes, qué mejor lugar para estar este verano que en Palacio Real de La Granja, tal y como hacían Felipe V y Isabel Farnesio, que disfrutaban de los meses de primavera en el Palacio de Aranjuez y cuando empezaban a subir las temperaturas se trasladaban a Segovia.

Viaje en el tiempo

Se han reconfigurado 12 salas de la planta baja y de la planta principal. “Le hemos dado un lavado de cara importante”, señaló Jordán de Urríes, con el objetivo de ver “cómo está más ajustado a un tiempo y ya perdido, ya que no se puede volver a ese momento, saber a ciencia cierta cómo lo tenía colocado Felipe V e Isabel Farnesio”.

Se ha buscado con criterios de los expertos conservadores de Pintura de Patrimonio Nacional, una “aproximación” lo más acertada posible. Jordán de Urríes, como responsable de Pintura del siglo XVIII, y Carmen García Frías, responsable de Pintura Antigua (siglos XIV al XVII), buscaron, para la nueva museografía, “una mayor coherencia historia, cómo estaría ordenado”, presentándolo con la base histórica que suponen los Inventarios Reales.

Escultura

El rey y la reina prepararon “a su gusto” este refugio veraniego, con el diseño de los Jardines y del Palacio de San Ildefonso. Interés por el exterior y por interior, con una excelente colección de pintura y escultura. En la planta de calle, tal y como lo dispuso la reina, está la colección estatuaria clásica en mármoles y yesos antiguos. Una planta con un diseño totalmente dieciochesco, con sus características “grandes enfiladas”, resumió el conservador, “un enorme pasillo de habitaciones”. Desde la primera puerta hasta la última. Galerías que servían para tener y disfrutar de una comunicación y diálogo entre la parte interior del Palacio y el exterior, marcado por los jardines y las vistas de la sierra.

Mientras que, en la planta principal, está la pintura y el mobiliario. Durante los días que ha durado la remodelación de la museografía, los visitantes han tenido a su alcance un itinerario alternativo. Mañana se abre al público la nueva propuesta en estas 12 salas. La colección de arte de Felipe V e Isabel Farnesio supera el millar de pinturas. El Palacio de La Granja podrías ser “la mayor pinacoteca del momento”.

El conservador de Patrimonio Nacional reconoció que no tiene “una calidad tan excelsa como la de los Austrias, con Tizziano o Velázquez”, pero sí es muy destacada. Se han traído al Real Sitio de San Ildefonso, 46 cuadros, con una amplia representación de pintores italianos del XVII, así como autores flamencos.

Jordán de Urríes, como experto en Pintura del XVIII, hizo referencia a tres cuadros de Francesco De Mura, que eran “bocetos para frescos del Palacio Real de Nápoles que envió don Carlos de Borbón a su madre”. Se han reunido en La Granja los cinco bocetos, uno estaba en el Palacio de Aranjuez, que conforman la escena de la bóveda de Nápoles, que todavía está intacta.

Con la firma de la reina

Además, se han reunido obras sobre ocho cabezas de Sibila y un paisaje que pintó la reina Isabel, registradas en 1746. Está en la misma sala donde hay varios pasteles dibujados por ella para concentrar “en esta salita toda la producción conocida de Isabel Farnesio”. Además de una apasionada coleccionista, la esposa de Felipe V, contó con un gran maestro, el pintor Andrea Procaccini, que también su agente de compra de obras de arte.

“Se ha incorporado un retrato de Louis-Michel Van Loo que estaba en el Palacio Real de Madrid, en una zona con acceso restringido, en el despacho de ayudantes de uso oficial, donde se ha sustituido por otro cuadro”, remarcó el conservador. Se trata del retrato de la infanta María Antonia Fernanda de Borbón. De Van Loo merece la pena destacar su retrato de ‘La familia de Felipe V’, así como los retratos, firmados por otros autores, de algunos de los miembros de la familia real.

Bodegones

Por otro lado, se han reordenado series. Jordán de Urríes puso como ejemplo la serie ‘Los cinco sentidos’, para facilitar su contemplación por parte del espectador y sea más didáctico, más claro y coherente. Lo mismo se ha hecho con cuatro bodegones de animales, que estaban dos en La Granja y dos en el Palacio Real de Madrid.

Otro pintor destacado es Francesco Solimena, maestro de De Mura, que firmó la llamada serie de ‘Las empresas del rey’, sobre Alejandro Magno, como rey de la Antigüedad, que fue “un modelo de buen rey”, destacó el experto en Arte. En cada obra de la serie se hace alusión a una de sus gestas o de sus virtudes.

En este caso, hablamos de ‘La batalla contra Darío’, que estaba ubicada en una pared secundaria de de la sala del Tocador de la Reina. Ahora ocupa un lugar destacadísimo, ya que sorprenderá al espectador, según sube por la escalera principal, “de frente”. El resto en la sala de los alabarderos. Esta sería se la llevó Alfonso XII a El Escorial, con el tiempo se recuperó la serie para San Ildefonso. “está completa aquí”, con esa presencia imponente de ‘La batalla contra Darío’.

Pintura del XVII

Del siglo XVII, hay que destacar la ‘Bendición de San Genaro’, patrón de Napoles, del pintor Andrea Malinconico. Es un cuadro muy grande que está en el Oratorio, que fue llevado Santa Catalina de Alejandría, por el pintor Guido Reni.

Otro nombre a tener en cuenta es él de Carlo Maratta y su estupenda colección de obra del pintor Tizziano, como ‘La Bacanal y los Andrios’ y ‘Baco y Ariadna’. “La colección de Maratta fue comprada por Felipe V, gracias a Andrea Procazzini”.

Discípulo de Rubens

El conservador de Patrimonio Nacional también resaltó la recuperación de “un cuadro enrollado en los almacenes”, sin bastidor y sin marco. Se ha recuperado y restaurado, se le ha puesto el bastidor y será colgado en La Granja cuando esté enmarcado. Se trata de ‘Cacería de leones’ (1665), de uno los discípulos de Rubens, Jan Frans Soolmaker.

Un recorrido por muchas pinturas que estaban en el Palacio Real de Madrid, en la Galería de las Colecciones Reales. La excelsa colección de Felipe V y Isabel de Farnesio está en el Museo de Prado. El resto estaba disperso pero ahora, “las obras más destacadas”, están en el Palacio Real de La Granja. Precisamente del Depósito del Prado, “la mejor versión que tenemos de ‘El cambista y su mujer”, de Marinus Reymerswaele, pintado en 1.538.

La visita a ambas plantas del Palacio Real de La Granja se había mantenido sin cambios desde el año 2.000. El nuevo proyecto se puso en marcha dos décadas después. El entonces director de las Colecciones Reales, José Luis Díez, apostó por un nuevo proyecto por acometer una notable mejora con más de 40 cuadros nuevos. Se trabajó durante el confinamiento, por los integrantes del departamento de Conservación, por el interés de la siguiente directora, Leticia Ruiz.