El Museo de Segovia, centro gestionado por la Junta de Castilla y León, seleccionó como ‘Pieza del Mes’ de febrero cuatro medidores de grano de los siglos XIX y XX, que forman parte de su fondo fondo etnográfico. Están fabricados en madera y hierro, con forma de trapecio invertido y se exponen junto al rasero que se utilizaba para ajustar el grano, una vez introducida en la estructura, a la medida correspondiente.
Las piezas expuestas son de diferentes medidas, de menor a mayor: medio celemín; un cuartillo y dos medidores de media fanega cada uno. La fanega era la medida de volumen más común en Castilla y equivale a lo que hoy en día serían unos 55,5 litros. Una fanega se correspondía con 12 celemines y cada celemín a cuatro cuartillos. El término fanega también hacía referencia a la superficie que se labraba en una jornada.
En los medidores aparece la marca de la ciudad de Segovia realizada a fuego, lo que garantizaba la correspondencia adecuada del tamaño con la medida oficial. Las medidas entre las regiones eran tan dispares que se grababan las marcas de las ciudades en los mismos medidores para certificar las correspondencias según cada zona.
Desde el Neolítico, ya existen evidencias de la necesidad de gestionar lo recolectado con la creación de diferentes fórmulas de medición de la cosecha. Ya en el cuarto milenio antes de Cristo existía un sistema de medidas simples expresadas en tablillas sumerias con escritura protocuneiforme, es decir, mediante pictogramas.
Dentro de la Península Ibérica, los primeros sistemas de medidas datan del segundo milenio antes de Cristo y se realizaban con el cálculo de la pesada de metales, concretamente, mediante el peso de shekels, las monedas de origen fenicio. La llegada de los romanos supuso la homogeneización de las fórmulas de peso en toda la zona mediterránea, mientras que la invasión musulmana trajo consigo otra configuración de medidas diferente, como la ‘fanega’, que se mantendrá hasta casi la introducción del sistema métrico decimal en 1849.
A pesar de que el sistema decimal ya se encontraba normalizado a finales del siglo XIX y su uso era obligatorio, en los campos castellanos se siguieron utilizando las fórmulas tradicionales de medida hasta entrado el siglo XX, como demuestran estos medidores de grano.
Con la iniciativa la ‘Pieza del mes’ el Museo de Segovia muestra sus fondos menos conocidos, ofreciendo al visitante la oportunidad de descubrir nuevos elementos. El horario de apertura del centro es de martes a sábado, de 10.00 a 14.00 horas, y de 16.00 a 19.00 horas, y los domingos de 10.00 a 14.00 horas.