Luis Planas, ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, ha asegurado este jueves que, probablemente, «un ave silvestre» sea el origen del foco de gripe aviar detectado esta semana en una granja de pavos en la localidad segoviana de Fuenterrebollo.

El titular de Agricultura, Pesca y Alimentación también ha indicado que el brote de Segovia está controlado. Además, ha señalado que no ha habido transmisión a otras explotaciones, según le han informado desde la Junta, y ha destacado la «perfecta» coordinación que ha existido en todo momento entre ambas administraciones.

Mientras se da por controlado el caso de Segovia, se confirma otro en Ávila.

Foco en Ávila

El Laboratorio Central de Veterinaria de Algete ha confirmado la detección del virus de Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP) H5N1 en muestras recogidas de cinco gansos (Anser anser) hallados muertos en la laguna El Bohodón, en la provincia de Ávila. Esta laguna está muy próxima a la laguna de El Oso, en el radio de 10 km, en la que el pasado 14 de enero se detectó un caso similar.

La zona está catalogada como zona de especial vigilancia por lo que, debido a la situación epidemiológica de la enfermedad en Europa, ya se habían adoptado medidas adicionales para prevenir posibles brotes de la enfermedad en aves domésticas.

Se trata del cuarto foco de IAAP H5N1 en aves silvestres detectado en España en 2022, después de los previamente notificados en la provincia de Lérida (en la ribera del río Segre), en la provincia de Ávila (en la laguna de El Oso) y en la provincia de Palencia (en la laguna de la Nava de Fuentes). Además, en aves domésticas el pasado 18 de enero se notificó un foco de IAAP H5N1 en una explotación de engorde de pavos en la provincia de Segovia.

El hallazgo del virus en aves silvestres no supone restricciones al movimiento de aves domésticas ni de sus productos.

Si bien hasta el momento no hay constancia de que el subtipo H5N1, que durante los últimos meses está afectando a Europa, tenga capacidad zoonósica significativa, es decir, su capacidad de transmitirse a las personas resulta muy reducida, se recomienda minimizar el contacto innecesario con las aves que muestren síntomas clínicos o se hallen muertas en el campo. En cualquier caso, este virus no puede ser transmitido al hombre a través de carne de ave cocinada, huevos o productos procesados derivados de ellos.