Con la oposición de UGT y CCOO y el apoyo de CEOE, en el día de ayer, el Consejo Regional de Trabajo de Castilla y León aprobó modificar el calendario laboral para el año 2023, trasladando el día festivo del 2 de enero al 25 de julio.
La última palabra en esta decisión la tendrá el Consejo de Gobierno de Castilla y León, el cual dirá si se lleva a cabo, finalmente, esta modificación.
Este cambio significaría terminar con el puente que ahora se disfruta tras fin de año y el día de año nuevo, para colocar una fiesta en mitad de semana. «Lo que perjudica claramente al trabajador», según apuntan desde los sindicatos.
Desde los sindicatos señalan a Vox como el artífice de esta modificación. En la que, desde su punto de vista, «no se tiene en cuenta el beneficio del trabajador».
A este respecto, señalar que Castilla y León no sería la única comunidad que celebra el día 25 de julio como día festivo. El día de Santiago Apóstol, considerado patrón y protector de España, es festivo en: Galicia, Madrid, País Vasco y Navarra.
Ahora, Castilla y León quiere sumarse a estas comunidades y establecer el día 25 de julio como día festivo para toda la comunidad.
De este modo, solo queda esperar a que el Consejo de Gobierno se pronuncie con la decisión definitiva.