El vicerrector del Campus María Zambrano de la Universidad de Valladolid (UVa) en Segovia, José Vicente Álvarez Bravo, ha asegurado que la primera fase del edificio recién inaugurado “se nos queda pequeño” y por este motivo se han visto obligados a trasladar diferentes clases de los grados en Publicidad y Relaciones Públicas, Derecho y Administración y Dirección de Empresas, al edificio donde se ubicaba la Escuela de Informática, propiedad de Caja Segovia.

Durante la primera visita del alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, al nuevo campus ubicado en el Alto de los Leones de Castilla, el vicerrector ha reconocido que se acomodarán aulas en el edificio de Informática ubicado en la Plaza de Santa Eulalia, al menos durante los dos próximos años, al ser “los más problemáticos”. Al respecto, explicó que el año que viene será cuando los grados en Relaciones Laborales, Turismo e Informática aumenten un curso, hasta cuatro años, manteniendo un mayor volumen de ocupación como pasa con otros grados que continúan teniendo cinco cursos, como el de Publicidad y Relaciones Públicas. Así, las aulas convivirán con los despachos de los docentes, que a espera de cerrar definitivamente el número de contrataciones, contará con un número entre 80 y 90 asociados, según estimó a falta de datos reales Álvarez Bravo.

El vicerrector de la UVa en Segovia aseguró que se hubieran evitado estos problemas si la Junta hubiese llevado a cabo la segunda fase del Campus, aunque reconoció que “los vientos soplan en una dirección concreta y nos hacen temer lo peor”. En este sentido, Álvarez Bravo manifestó que no renunciará a tener un “campus completo” porque es un derecho para la capital del Acueducto y sus estudiantes.

No obstante señaló que los problemas de espacio serán “puntuales” en el actual edificio que imparte cerca de 300 asignaturas, y confió que la situación se vaya estabilizando una vez terminado el mes de octubre. Para finalizar, entendió el malestar de los alumnos y pidió comprensión, porque como señaló, todo el personal del edificio está “adquiriendo experiencia” porque son los primeros meses de vida del Campus María Zambrano, de cara a ir conociendo los puntos fuertes y débiles para poder planificar y prever las necesidades.

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