«Tibieza». Es la misma palabra que han utilizado los portavoces de los grupos municipales de Ciudadanos e Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Segovia para calificar la actitud de la alcaldesa Clara Luquero ante la crisis provocada por las amenazas del ex teniente de alcalde, Alfonso Reguera.
No obstante, la portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Segovia, María José García Orejana, ha sido mucho más dura, ya que, además de reprochar a la Alcaldesa “su tibieza e irresponsabilidad», considera que Clara Luquero es “cómplice de la situación”, por lo tanto, “no es digna para seguir representando a todos los segovianos”.
García Orejana asegura que la dimisión de Alfonso Reguera “llega tarde” y la alcaldesa, Clara Luquero, “no ha estado a la altura de las circunstancias”, demostrando una vez más “su falta de liderazgo”. Desde la formación naranja sostuvieron que los segovianos necesitan una regidora que actúe “por el interés general de la ciudad, y no el de su equipo de gobierno”.
Por su parte, el portavoz de IU en el Ayuntamiento de Segovia, Ángel Galindo, criticó “la tibieza” de Clara Luquero que tenía que haber obligado a dimitir “al momento” a Alfonso Reguera “en cuanto reconoció los hechos que denunció el policía”. Galindo aseguró que las instituciones democráticas no pueden contar con representantes que cometan “tropelías como ésta” sino tener «un comportamiento ejemplar».
Ángel Galindo remarcó que el incidente con el policía local “no fue una conversación subida de tono”, ni «un incidente menor”, sino un asunto de “una gravedad suficiente como para dimitir al momento”. El portavoz de IU recordó que el funcionario forrma parte de la Junta de Persona y el conflicto tuvo lugar “tras las reivindicaciones por parte de la policía local para mejorar sus condiciones laborales”, por lo que una “una alcaldesa que se considera socialista” tenía que haber cesado “inmediatamente a un edil que amenaza a un representante de los trabajadores”.
Enrocada durante la crisis
García Orejana agradeció a Reguera, “aunque obligado y tarde”, haya dado «un paso al lado” y lamentó que Luquero “haya estado enrocada durante toda esta grave crisis”. La dimisión del concejal de Urbanismo y Hacienda, argumentó la portavoz de Cs, sólo obedece “a la presión de la oposición, Policía Local y opinión pública”, porque Luquero “ha evidenciado que su papel al frente del Ayuntamiento es simbólico”, sin ser “capaz de liderar y cesar de inmediato al que fuera su superconcejal».
Por otro lado, Galindo aseguró que Reguera se va del Ayuntamiento de Segovia por “un comportamiento totalmente impropio de un representante de la ciudadanía” y porque ésta ha sido “la gota que ha colmado el vaso y traspasado todas las líneas rojas para un representante público”. Desde IU remarcaron que como primer teniente de alcalde “tenía que haber dado ejemplo” y mantenerse en el cargo “no era una opción” tras amenazar en público a un policía local de servicio, y además, en política, “nadie es insustituible o imprescindible”.