“Si hay que ir a elecciones, vamos”. Lo afirma el portavoz de Ciudadanos en las Cortes de Castilla y León, David Castaño, el encargado de negociar con el PP la enmienda a la Proposición no de Ley (PNL) del PSOE para exigir la retirada de la reordenación sanitaria en el medio rural, y que al final del Grupo Popular votó a favor.
En una entrevista que hoy publica El Norte de Castilla, reconoce que le enfada que se dude de la lealtad de los procuradores naranjas, que volverán a votar si hay una nueva moción socialista en marzo. “Quien quiera convocar unos comicios, que explique por qué”, apunta el portavoz de Ciudadanos en las Cortes, que asegura que la estabilidad, “si se quiere”, está garantizada.
«Todo lo que hacemos es por el interés general, guste o no. Todos entienden que ahí está nuestro acuerdo con el PP y en él no están las mociones de censura. No hacemos mociones de censura ni las vamos a apoyar. Tenemos un acuerdo para cuatro años y lo vamos a cumplir”, añade.
Castaño considera que si hay elecciones anticipadas, será “por cálculo electoral”. “ Aquí hay un gran proyecto, una gran agenda legislativa, una recuperación que ya se está dando, hay que administrar los fondos europeos y el ajuste fiscal, el mayor presupuesto social en la historia de la comunidad… Y esa es nuestra agenda. El proyecto que hay en la Junta es muy bonito. El que quiera llevarnos a elecciones que lo explique. Y si hay que ir, vamos”.
En todo caso, si se produjeran, le gustaría contar tanto con la consejera de Sanidad, Verónica Casado, como con Francisco Igea. “¿De número uno? Como número uno son cosas que no le corresponden ni a él ni a mí, sino a los afiliados, que votan en primarias. Pero el señor Igea es un gran activo en nuestro partido”, sentencia.
Modelo sanitario
Respecto a la ordenación sanitaria, afirma que “cualquier nueva planificación de la sanidad siempre trae tensiones. Porque no solo hablamos de sanidad, sino de la propia ordenación del territorio, de municipios y de cómo damos los servicios esenciales”, indica, para precisar que hay que asimilar como “algo normal” esa tensión, que genera la política sanitaria, y que se queda con lo positivo de que el PSOE se vaya a sentar a negociar. “Algo que es absolutamente necesario”.
“Si otro partido político tiene ideas mejores que las nuestras las vamos a aceptar”, añade, para precisar: “No hacer nada, y lo saben porque han llevado la sanidad 30 años, va a generar más problemas”, lo que “siempre se ha escogido cada vez que ha habido un conflicto”.
Acepta la propuesta del PSOE, aunque la ve injusta, y explica que conoció que el PP iba a votar a favor de la proposición cuando lo anunció el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco. En todo caso, defiende el papel de la consejera de Sanidad, Verónica Casado, y duda de que la idea del PP fuera debilitar a la consejera de Sanidad. “Lo que le pasa al PP es que es un partido con muchos alcaldes y cualquier reforma, cualquier planificación, crea tensiones. Y esas tensiones al final llegan al propio PP”.