La Cámara ofrece un curso elemental de chino mandarín dirigido preferentemente a comerciantes y hosteleros que deseen mejorar sus ventas entre los turistas de ese país, adquiriendo para ello unos conocimientos básicos de su lengua. Facilitará un primer contacto con el idioma, proporcionando una base de vocabulario y frases de uso habitual, además de términos y expresiones de uso específico para el negocio de cada uno de los participantes.
Durante el curso se trabajará sobre la pronunciación aplicando el sistema de transcripción fonética del chino denominado pinyin, que es la equivalencia del sonido del chino a caracteres occidentales, “algo que facilita mucho el aprendizaje en los primeros pasos con este idioma cuando aún no se conoce el alfabeto chino, que son palabras mayores”, indicaron fuentes de la Cámara a través de un comunicado.
El curso, de 20 horas de duración, comenzará el próximo 3 de febrero y se desarrollará los lunes y martes hasta el 8 de abril. Tiene un máximo de ocho plazas disponibles y se llevará a cabo en un horario compatible con la actividad profesional o empresarial, de 20.45 a 21.45.
Según destacaron desde la Cámara, un establecimiento comercial y hostelero, bien ubicado y con productos atractivos para el turista chino, tiene a su alcance “oportunidades de venta que despegan cuando pasa del total desconocimiento de este idioma al conocimiento de algunas palabras y frases al servicio de su negocio”. Y esto, según aseguran, “es más fácil de lo que parece a primera vista”.
China es en la actualidad el primer país emisor de turistas hacia el resto del mundo. Las autoridades del sector turístico del gigante asiático estiman que pueden alcanzar la cifra de 100 millones en 2014, 13 más que en 2013, “y cada año aumenta su número”.
Las preferencias del turista chino
“A los turistas chinos no les atrae especialmente la oferta tradicional de nuestro país como el sol y la playa” pero, como reseñaron desde la Cámara, “valoran y disfrutan el patrimonio histórico, natural y gastronómico y las actividades culturales”. En este sentido, “si algo caracteriza al nuevo turista chino es el tiempo y el dinero que dedica a las compras y sus gustos concretos por los buenos productos locales”, así como “por productos y marcas españolas y europeas de calidad de sectores como moda, joyería y perfumería, por nombrar los más relevantes”.
Y Segovia, “sin duda, reúne condiciones para consolidarse con el tiempo como un destino atractivo y de grato recuerdo para los turistas de esta nacionalidad”. No en vano, ya es habitual ver grupos de orientales por las calles de la ciudad del Acueducto, “y cada año su protagonismo va a ser mayor si atendemos a las tasas de crecimiento en el número de turistas de esta nacionalidad que se están produciendo año a año”.
La barrera idiomática sigue siendo difícil de sortear, “pero al igual que a los españoles nos gusta que intenten atendernos en nuestro idioma cuando viajamos fuera de nuestro país, los chinos valoran el esfuerzo que demuestra una persona que se dirige a ellos en su idioma, así como que conozca y maneje correctamente algunas de sus claves culturales”, prosiguieron desde la institución cameral segoviana. Y ese esfuerzo, como valoraron, “tiene su recompensa”.
