La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F) ha exigido al Ayuntamiento de Segovia mediante un comunicado “la inmediata convocatoria de todas las plazas vacantes de bomberos”, para cubrir el 100% de la tasa de reposición que el Gobierno ha aprobado para los servicios esenciales. CSI-F alerta de que “alrededor del 30% de la plantilla puede quedar cubierta por interinos, lo que es una “temeridad” para un servicio de emergencias y de seguridad como el de los bomberos; y califica de “vergüenza intolerable” el reciente concurso-oposición de tres plazas de bombero conductor que, al final, ha quedado desierto, después de que ninguno de los 103 opositores superara la tercera prueba, de siete que había en el proceso. CSI-F califica de “irregulares” y “sospechosos” los cambios que se han producido en las bases de este último concurso, “como si se hubieran hecho para beneficiar a alguien, porque de lo contrario no se puede entender el despropósito de lo ocurrido”.
CSI-F explica que en las bases de este concurso de tres plazas para bombero conductor, se han hecho varias modificaciones respecto a convocatorias anteriores, e incluso se han cambiado las bases iniciales que se dieron a conocer en marzo. Así, se ha observado un exceso de puntuación por ciertas titulaciones superiores y, sin embargo, apenas se puntúa la experiencia y la formación específica. En este sentido, CSI-F remarca que para ocupar la plaza de bombero conductor solamente se requiere tener el graduado escolar.
CSI-F también resalta que el nivel de preparación física exigido en esta convocatoria de 2015 «ha sido muy inferior al de las pruebas físicas de la convocatoria de 2012, lo que lleva a pensar que se hizo intencionadamente para beneficiar a algún participante”. Respecto a estas pruebas físicas, y al contrario de lo que opina UGT, el sindicato independiente CSI-F considera que “las pruebas físicas de 2012 fueron demasiado exigentes y las de 2015 todo lo contrario”. En 2012 solamente superaron las pruebas físicas un 6,7 % de los opositores, y en 2015 más de un 66,6 %; “lo que quiere decir que ambas pruebas son inadecuadas, la primera por demasiado rigurosa y la segunda por demasiado fácil”.
El sindicato ha insistido en que “un tribunal serio no puede ni debe jugar con los opositores, como se ha hecho en esta ocasión del concurso de bomberos conductor. Una convocatoria que “desprendía un tufo de sospechosas irregularidades, que debería haber sido atajado y aclarado por el Ayuntamiento”. Precisamente, CSI-F recuerda que presentó un escrito al Ayuntamiento, advirtiendo de las “sospechosas circunstancias del proceso selectivo y de los extraños cambios de las bases”, pero la respuesta fue una exigencia de pruebas que demostraran esas posibles irregularidades.
Para finalizar CSI-F reclama que “ante el cúmulo de ‘sospechas’ por esta convocatoria de bombero conductor”, y la circunstancia de haber quedado desierta el Ayuntamiento de Segovia haga “la inmediata convocatoria de las plazas vacantes de bomberos, para finales de 2015 o principios de 2016”, añadiendo a las tres plazas que han quedado vacantes las que se puedan cubrir conforme a la tasa de reposición marcada en la Ley de Presupuestos para 2016. CSI-F, además, exige que se modifiquen las bases de la convocatoria, de tal forma que se baje la puntuación máxima por titulaciones a un punto como ocurrió en 2012, y que se puntúe más la experiencia y la formación.
Foto: bombero de Segovia en un simulacro/Ical