La escuela segoviana de socorrismo (ESS), dentro de la campaña de prevención del ahogamiento infantil, “En el Agua, Cuento Contigo”, que se puso en marcha en el pasado mes de Abril, y especialmente en estos días, en los que por desgracia, se han multiplicado los casos de ahogamiento en menores, ha compartido con los participantes en el campus «Roberto y Ricardo» medidas de auto-protección en el medio acuático y ha enseñado a los niños cómo comportarse ante una parada cardio-respiratoria o un atragantamiento. Además se les ha entregado un folleto con el decálogo de seguridad en el agua y un sencillo Cuestionario de Participación con el fin de analizar la exposición familiar al riesgo de ahogamiento en entornos acuáticos. Con la información recogida en este cuestionario,se realizará un estudio que será presentado en el Congreso internacional de Socorrismo SICOD que se celebrara en Madrid el próximo año.
El próximo sábado, continuando con la campaña y en colaboración con el Campus, la ESS estará presente en la jornada de convivencia padres-hijos, donde se podrá entregar o rellenar el cuestionario y todos aquellos padres que estén interesados, podrán participar en un taller de RCP, además podrán colaborar con la campaña adquiriendo el cuento “Alex va a la piscina”, que se ha creado como una herramienta didáctica y de acercamiento a padres e hijos dentro de la Campaña.
El ahogamiento es la principal causa de muerte accidental en niñosentre 5 y 14 años en todo el mundo, sólo se precisan 27 segundos para que un menor que no sabe nadar comience a ahogarse y de 3 a 5 minutos para que quede con graves secuelas o fallezca como consecuencia de un ahogamiento. Una deficiente supervisión paterna y la falta de medidas de protección adecuadas causan anualmente en España más de una veintena de fallecimientos o graves discapacidades en niños derivadas de un accidente de ahogamiento relacionado con el medio acuático.
El vallado de las piscinas domésticas reduce el riesgo de ahogamiento en un 85% y la vigilancia y supervisión paterna prácticamente eliminan el riesgo de que el niño sufra un incidente con riesgo vital.
Foto: alumnos del campus «Roberto y Ricardo» haciendo prácticas de resucitación cardiopulmonar