El número de zonas básicas de salud de Castilla y León en riesgo de confinamiento no deja de crecer y la semana ha finalizado con casi medio centenar en esta situación. En concreto, según la información facilitada este domingo por la Consejería de Sanidad son 48 -seis más que ayer- las zonas al borde de seguir los pasos de Íscar y Pedrajas de San Esteban (Valladolid) y de Aranda de Duero, en la provincia de Burgos, al encontrarse por encima de los cinco casos positivos por COVID-19 por cada 10.000 habitantes.
En estos territorios, que aparecen en color naranja en el mapa de casos positivos de coronavirus en los últimos siete días, se recomienda restringir al máximo el contacto social, así como evitar reuniones de más de diez personas y limitar al máximo la exposición en lugares cerrados para así evitar la propagación del virus.
Además, hay otras 31 áreas que se encuentra entre 2,5 y cinco positivos, casos en los que se pide que se extremen las medidas de precaución y prevención además de que no se lleven a cabo desplazamientos innecesarios. Se trata de ocho zonas básicas de salud en la provincia de Salamanca; cuatro en Zamora, Palencia y Valladolid; tres en Burgos y Ávila; dos en León y Segovia; y una en Soria.
Zamora y Palencia, junto con Ávila son las provincias con menor incidencia y con una única zona cada una de ellas en riesgo de confinamiento. En el caso de Zamora, se trata de la zona básica de salud de Villalpando, mientras que en el caso de Palencia se trata de la zona de Palencia Rural, con una tasa de 12,6 por cada 10.000 habitantes. También en Ávila se encuentra en color naranja la zona básica de salud de Las Navas del Marqués.
Burgos y Salamanca siguen siendo las provincias más comprometidas, con 13 zonas naranja en cada una de ellas. Como reconoció hoy el propio vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea, las áreas urbanas de Burgos y Salamanca, pero también la de Valladolid, son las que acaparan la principal preocupación a día de hoy por parte del Ejecutivo autonómico.
Las 13 zonas con mayor incidencia del COVID-19 son Aranda Rural, Melgar Fernamental, Sedano, Briviesca, Burgos Rural Sur, Quintanar de la Sierra, Villarcayo, Valle de Mena, Medina de Pomar, Belorado y Los Comuneros. Además, en el caso de la capital burgalesa están las áreas de Cristóbal Acosta, Los Comuneros y Santa Clara.
También preocupa la situación en el caso de Salamanca, donde la mayor incidencia se da en las zonas básicas de salud de Guijuelo, Matilla de los Caños, Pedrosillo el Ralo y Periurbana Norte. Además, este domingo se han unido también las zonas Periurbana Sur y Robleda. En la capital leonesa, esta situación se da en la zona de San José, Elena Ginel Díez, Garrido Norte -esta última nueva este domingo- y Sur, Alamedilla y San Juan.
En la provincia de Valladolid, se detectan ocho zonas básicas de salud en color naranja, si bien solo Mota del Marqués corresponde a la provincia, a la que hoy se ha sumado Cigales. El resto se localizan en la capital vallisoletana y son Circunvalación, Delicias II, Plaza del Ejército, Casa del Barco, Circular y Pilarica.
En la provincia de León las zonas con más de cinco casos por cada 10.000 habitantes son Villafranca del Bierzo, Astorga I y II y hoy se ha unido La Bañeza II. En la provincia de Segovia se encuentran en esta situación las zonas de Villacastín y Cuéllar; mientras que en el caso de Soria se trata de San Leonardo de Yagüe, Soria Rural, Almazán, Soria Sur y Soria Norte.
Todas estas zonas básicas de salud cuentan con más de cinco casos por cada 10.000 habitantes, y se aproximan a la situación de sospecha de transmisión comunitaria que llevó a la Junta a solicitar el confinamiento en el caso de Pedrajas de San Esteban e Iscar, en la provincia de Valladolid, donde el próximo fin de semana está previsto que finalicen los 14 días de aislamiento; y también de Aranda de Duero, en Burgos, cuya situación se revisará el próximo fin de semana.