La Junta de Castilla y León trabaja ya en un cambio de estrategia para frenar el avance del COVID-19 en la Comunidad a partir de la introducción de nuevos test, que ofrecen resultados en menor tiempo y que permiten hacer aislamientos de personas contagiadas o bajo sospecha de una forma más rápida. Además, se ofrecerá la posibilidad de ingresar en las denomindas ‘Arcas de Noé’ para las persona que no puedan cumplir la cuarentena en sus domicilios.

Así lo avanzó este sábado en Segovia el vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea, minutos antes de asistir como invitado al Hay Festival, que celebra el ‘Ft Weekend: Debates sobre Europa’, con la participación de figuras como Luis Garicano, Esteban González Pons, Meritxell Batet, Dita Charanzová, Joaquín Almunia y Rebecca Grynspan en conversación con Daniel Dombey.

Francisco Igea avanzó los cambios que prepara la Junta un día después de que el Consejo de Gobierno mantuviera una reunión durante tres horas con el comité de expertos, que según precisó este sábado el vicepresidente, les aconsejó “perfeccionar” y “apretar” las medidas aplicadas hasta ahora. Además, descartaron un confinamiento general y la declaración del estado de alarma como en primavera.

En ese sentido, el portavoz de la Junta indicó que los próximos cambios llegarán a través de la introducción de unos nuevos test más rápidos, que también agilizan los aislamientos de personas, al acelerar la detección de los contagios. Precisamente, este viernes el comité de expertos que asesora al Ejecutivo planteó la introducción de test de antígenos de nueva generación, así como incorporar más rastreados y reforzar la Atención Primaria.

Otra de las medidas que planea la Junta, como avanzó esta semana el vicepresidente, es la apertura de espacios, denominados ‘Arcas de Noé’, para aquellas personas que no puedan hacer cuarentena en sus domicilios, con el objetivo de facilitar que se cumplen los aislamientos, ahora fijados en 14 días, si bien los expertos proponen reducir ese periodo a los diez días.

Igualmente, Francisco Igea se dirigió a la población para insistir en la importancia que tiene la conciencia social sobre el cumplimiento de las medidas puestas en marcha en este momento para “aplanar la curva” epidemiológica del coronavirus. Insistió en que “cada uno” debe hacer su trabajo y añadió que en la Junta no pretenden trasladar responsabilidades a los ciudadanos, pero recalcó que sin ellos es “imposible” frenar al virus.

Nuevo récord

Por otra parte, el vicepresidente de la Junta reconoció que los contagios siguen en fase de crecimiento, pero recalcó que lo hacen a un menor ritmo que en marzo, si bien reconoció que este sábado se marcó un nuevo récord al notificarse más de 1.000 contagios en un día. No obstante, destacó que la cifra de ingresados ha bajado por las altas hospitalarias, lo que recalcó es el indicador más “sólido”.

Igea auguró que las cifras de contagiados van a seguir creciendo “una o dos semanas”, por lo que volvió a insistir en la importaencia de que se cumplan las medidas dictadas por las autoridades. Así se refirió a la situación del Área de Salud de Valladolid Este, que reconoció presenta unos valores “muy llamativos”, que espera se reviertan con la nueva estrategia que buscar “mejorar los confinamientos” y llegar más a la población.

Finalmente, el vicepresidente concluyó que Castilla y León vive un momento “difícil” que no ocultan y como muestra puso la reunión del comité de expertos con el Consejo de Gobierno.