Castilla y León se convertirá en “territorio con cero” vertederos y escombreras en dos años, de forma que se clausurarán los últimos puntos donde se concentraban los residuos, además de los 2.263 minidepósitos identificados. La Junta también prevé rematar en este mandato la depuración en municipios con más de 2.000 habitantes y sentará las bases para atender, en colaboración con las diputaciones, a pequeñas poblaciones para que en la próxima legislatura se depuren todas las aguas.

Se trata de dos “proyectos muy ambiciosos” para el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, que destacó la necesidad de actuar tanto en depuración, como en la gestión de los residuos, para que una vez que los vertederos y escombreras sean borrados del mapa, no vuelvan a surgir en el medio rural.

Respecto al sellado de vertederos, el consejero garantizó que este año quedarán clausurados los 556 existentes en la Comunidad, lo que en conjunto habrá supuesto una inversión de 127 millones. Juan Carlos Suárez-Quiñones explicó que cinco proyectos están en ejecución y en fase de licitación. No obstante, aseguró que una vez alcanzado este hito se debe dar un “paso más” y clausurar los 2.263 “minivertederos” o escombreras en este mandato.

En conjunto supondrá una inversión de 20 millones, que se financiará al 50 % por la Consejería, puesto que se encargará del sellado de la escombrera y la puesta en valor y restauración de la zona. Las diputaciones asumirán la gestión del sistema alternativo de recogida de residuos para evitar que surjan de nuevo.

 

70 millones en depuración

Suárez-Quiñones garantizó que los 198 núcleos con más de 2.000 habitantes equivalentes (población e instalaciones industriales o agrarias) depurarán sus aguas residuales en dos años. Todo ello, exige una inversión de 75 millones de euros en 40 municipios, de los que más de once figuran en el Presupuesto General de la Comunidad para este año.

 

La última fase

En cuanto a los municipios ubicados en los espacios naturales, una de las prioridades de la Junta debido a la zona en la que están situados, apuntó que ya cuentan con depuración el Parque de Picos de Europa, el de la Sierra de Gredos, el del Lago de Sanabria, las Hoces del Duratón, el del Cañón de Río Lobos, el de Ojo Guareña y La Fuentona.

“Un conjunto muy importante de actuaciones con una importante inversión que nos compromete con el medio natural y seguiremos”, afirmó el consejero, quien también destacó que la Junta colabora con los municipios para sufragar el 50 % del coste de mantenimiento de las estaciones.

Por otra parte, Suárez-Quiñones avanzó que para el resto de poblaciones, pequeños pueblos con fosas sépticas y depuradoras, la Junta prepara un programa de actuación con las diputaciones, para tratar “todas las aguas residuales” de los municipios de Castilla y León. El objetivo es que en un “horizonte razonable”, la próxima legislatura, se complete esta tercera y última fase o al menos esté casi termina. “Estamos hablando de un proyecto muy ambicioso”.