El folclorista segoviano Ismael Peña, bajo el nombre ‘En la piel del agua’, muestra en el patio de columnas de la Diputación de Segovia, una selección de botijos decorados por artistas españoles del último siglo, como Dalí, Forges o Mingote. En el acto de inauguración, Peña estuvo acompañado por el presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente, por el diputado de Cultura, Juventud y Deportes, José María Bravo, y por el propio artista, así como personalidades y amigos de la cultura segoviana, informa Ical.
Botijos hechos de cristal; botijos reconvertidos en ‘máquinas de beber’, como el decorado por Roberto Fernández Soravilla; botijos que son el reflejo de que ancha es Castilla, como el pintado por el palentino Chema Manzano; botijos coloridos, de la mano de Eduardo Úrculo y el donado por Antonio Mingote, o carentes de color, pero con trazos igualmente históricos, como el ilustrado por Forges o el regalado por Salvador Dalí, que preside la exposición, forman parte de una selección de 40 botijos, de una colección de más de un centenar, que el folclorista guarda con mimo en su casa.
El espectador también puede ver, en la institución provincial, los botijos que se han encargado de reinterpretar artistas segovianos como José Luis López Saura, y el dibujante Antonio Madrigal, quienes han sabido dar otra óptica a un elemento.
Miguel Ángel de Vicente aseguró que el botijo “ha caracterizado a la sociedad del medio rural, tanto en Castilla como en el resto de España, pero que, sin embargo, nunca ha entendido de clases sociales, pues al igual que podemos encontrarlo a la sombra de cualquier tierra de labranza, también podríamos situarlo a la entrada de cualquier patio señorial andaluz”.
Un botijo con “su uso, su asa, su boca y pitorro lo hacen inconfundible”, continuó el presidente de la institución provincial, reconociendo al mismo tiempo el valor añadido que le han otorgado todos y cada uno de los artistas que, como indicaba el propietario de los que forman parte de la exposición, que “generosamente y amistosamente han dibujado, han plasmado, han pintado e incluso en alguna ocasión han roto… en definitiva, han hecho lo que han querido con ellos para ir conformando la colección”.
El veterano Ismael Peña tienen otras colecciones muy destacadas como: 1.200 instrumentos de música, 2.700 juguetes, 600 trajes, 700 encajes o 1.200 objetos vinculados a la vida tradicional castellana.