Comisiones Obreras advirtió hoy de que los efectos de la crisis del COVID-19 está agravando los problemas de conciliación familiar y laboral, ya que al cierre de colegios, guarderías y centros de días, se ha sumado la pérdida del colchón que para muchas familias suponían los abuelos en el cuidado de los menores. Ante esta situación, el sindicato reclama sensibilidad a las empresas y una normativa adaptada a la nueva realidad.

La secretaria de Mujer y Políticas de Igualdad de CCOO Castilla y León, Yolanda Martín, denunció que las mujeres están siendo las “paganas” de esta nueva situación como demuestra que la tasa de parcialidad femenina en la Comunidad haya subido hasta el 79 por ciento, más de cinco puntos por encima de la nacional, según los últimos datos de la EPA.

Martín también argumentó que es necesario una regulación actualizada del teletrabajo en la que se incluya la perspectiva de género y aunque reconoció que dentro del Diálogo Social se contemplan ayudas para la excedencia y la reducción de jornada, “estas subvenciones son insuficientes y presentan requisitos muy rígidos”.

A su vez, aseguró que la sociedad no “se puede permitir un retroceso en los derechos de la mujer” y criticó que la realidad actual está ensanchando la brecha de género y “condenando a la mujeres a menores salarios y, en el futuro, pensiones más bajas”.

Martín indicó que es necesario adaptar y flexibilizar turnos que permitan la conciliación tanto a las personas que la tienen reconocida como a las que no, “pero que en las circunstancias actuales necesitan horarios compatibles con la vida personal”. Además, también pidió que se establezcan dedidas que favorezcan la situación de las familias monoparentales, que se mantenega el teletrabajo en aquellos puestos que lo permitan, e incidió en la corresponsabilidad en el cuidado de mayores o menores entre todos los miembros de la familia.

Por su parte, Marcos Gutiérrez, secretario de Servicios de CCOO Castilla y León, reclamó “sensibilidad” a las empresas y más cuando con la entrada en toda la Comunidad en la fase 1 de la desescalada miles de trabajadores de la hostelería se van se reincorporarán a sus empleos.

En este sentido, Gutiérrez aseguró que el 30 por ciento de los comercios de la Comunidad se han visto afectados por ERTE, porcentaje que el caso de los trabajadores supera el 38 por ciento -unos 45.000 sobre los 118.000 trabajadores-, y cifró en el 80 por ciento el porcentaje de establecimientos que hoy abrirán sus puertas.

En cuanto a la hostelería, Gutiérrez indicó que hoy podrían abrir sus puertas la mitad de los establecimientos, por los que uno 13.000 trabajadores, de más de 44.000 afectados, podrían salir de los por ERTE. En este sentido, el secretario de Servicios de CCOO recalcó el peso que el comercio y la hostelería tienen en la economía de Castilla y León, ya que suponen el 23 por ciento del PIB y el 25 por ciento del empleo, y además de insistir en que han sido de los sectores más golpeados por la crisis, también hizo un llamamiento a toda la sociedad para “recuperar la confianza” y volver a estos establecimientos.