El cinturón de seguridad es el elemento de seguridad pasiva más eficaz de los vehículos y el que más vidas ha salvado. La Organización Mundial de la Salud en su informe La necesidad de cinturones de seguridad y sistemas de retención infantil recoge que el uso de estos dispositivos reduce la probabilidad de resultar muerto de aproximadamente un 50%.
Por este motivo y porque todavía el uso de este dispositivo de seguridad no está generalizado en Castilla y León, en 2018, 18 fallecidos que viajaban en turismo o furgoneta (19%) no hacían uso del cinturón en el momento del accidente), la Dirección General de Tráfico pone en marcha desde el lunes 9 y hasta el domingo 15 de marzo una nueva campaña de vigilancia y concienciación del uso del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil. Esta campaña se enmarca dentro del calendario anual de actuaciones especiales previstas por la Organización Internacional de Policías de Tráfico (TISPOL). Esto significa que en numerosos países las policías de tráfico van a incrementar la vigilancia.
Como suele ser habitual en las campañas puestas en marcha por la DGT, se ha mandado invitación a los municipios para que a través de sus policías locales se sumen a la campaña de modo que el mensaje del uso de los dispositivos de retención sea generalizado independientemente del tipo de desplazamientos que se realice o la vía por la que se transite.
Además de los controles que realicen las policías de tráfico, la tecnología ayuda también a la captación del no uso del mismo. La DGT continúa avanzando en desarrollos tecnológicos de video análisis para la detección de la no utilización del cinturón así como como del uso del móvil al volante.
En Castilla y León disponemos de 24 cámaras de control de uso del cinturón de seguridad.
LA DIFERENCIA ENTRE LA VIDA Y LA MUERTE
Aunque los dispositivos de retención no impiden que ocurran accidentes, éstos juegan un papel muy importante en la gravedad de las heridas sufridas por sus ocupantes en caso de accidente.
Además, los usuarios que no lo llevan abrochado en el momento de la colisión, representan la mayoría de las víctimas mortales en accidentes de carretera.
Además, la creencia de que si el vehículo dispone de airbag éste nos puede salvar, es falsa, ya que esta bolsa de gas no es eficaz si no se complementa con la utilización del cinturón de seguridad, por lo que ambos sistemas están pensados para funcionar de forma complementaria.
SRI, EL MEJOR SEGURO DE VIDA DEL NIÑO
Pero si el uso del cinturón de seguridad es imprescindible para los adultos, también lo es para los menores, ya que los sistemas de retención infantil son diseñados para proteger a los bebes y a los niños en caso de colisión, parada brusca, maniobra de evasión o apertura de puerta cuando el vehículo está en movimiento.
Un niño sin sujeción multiplica por 5 las posibilidades de sufrir lesiones mortales o graves. Además, nueve de cada diez lesiones infantiles graves o mortales se habrían evitado si se hubieran utilizado sistemas de retención.
En 2018, los 4 menores de 12 años fallecidos en Castilla y León, que viajaban en turismo o furgoneta hacían uso del mismo.
El riesgo que implica que los pasajeros no se abrochen el cinturón de seguridad no es solo que se lesionen ellos mismos en caso de accidente, sino que golpearán los asientos delanteros con la fuerza de su peso, multiplicada por la velocidad a la que circulen –ya que no son retenidos por el cinturón de seguridad-. Y a una velocidad tan baja como 60km/h, un pasajero que pese 75 kilos golpearía el asiento delantero con una fuerza equivalente al peso de un elefante de 4,2 toneladas.
La legislación española obliga a que los menores de edad de estatura igual o inferior a 135 cm que se desplacen en vehículo, además de viajar con el sistema de retención infantil adecuado a su talla y peso como la norma exige, deberán ir sentados obligatoriamente en los asientos traseros de los vehículos, excepto:
1.Cuando el vehículo no disponga de asientos traseros
2.Cuando todos los asientos traseros estén ya ocupados por otros menores de las mismas características.
3.Cuando no sea posible instalar en dichos asientos traseros todos los sistemas de retención infantil.
Solamente en estos casos, los menores podrán ocupar el asiento delantero del vehículo, pero siempre utilizando el sistema de retención homologado a su talla y peso.
Según el Reglamento de Circulación, los sistemas de retención infantil se instalarán en el vehículo siempre de acuerdo con las instrucciones que haya facilitado su fabricante, instrucciones en las que se indicará de qué forma y en qué tipo de vehículos se pueden utilizar de forma segura.