La Junta de Castilla y León presenta este mes de julio en el Archivo Histórico Provincial, en el marco de la actividad ‘Tesoros Ocultos del Archivo’, un pleito procedente de los juzgados de Segovia y fechado en 1865, en el que Ezequiel González aparece como abogado defensor de los derechos de su sobrino, menor de edad.
En la página que muestra el Archivo aparece la firma autógrafa de este ilustre segoviano conocido por su calle y el instituto de enseñanza que lleva su nombre. En este documento se recoge una demanda presentada en representación de su sobrino, Julián de la Bodega, contra el impago de una deuda pendiente de Cristóbal Martín, vecino de Cabañas.
La preocupación por su familia le llevó a representar a su sobrino, huérfano, ante los tribunales de justicia cuando un acreedor del padre del menor dejó de pagar las deudas pendientes ante la indefensión de éste. El pleito fue ganado por Ezequiel González, condenando a pagar la deuda pendiente al acreedor.
La figura de Ezequiel González
Ezequiel González de la Bodega nació en Turégano, aunque no se sabe con exactitud si fue en 1818, cuando señalan todas sus biografías, o en 1820, tal como ha documentado recientemente Mar Peñas, archivera del Archivo Diocesano de Segovia, donde ha localizado su partida de bautismo. Lo que sí se conoce es que procedía de una familia burguesa asentada en el barrio del Salvador. Fue abogado del Ilustre Colegio de Madrid y presidió la Diputación Provincial. Encabezó en la provincia de Segovia la Revolución ‘Gloriosa’ de 1868 que acabó con el reinado de Isabel II. Durante el periodo de la Restauración Borbónica permaneció alejado de la política, dedicándose a su labor al frente de la Sociedad Económica de Amigos del País, que también presidía, y a adquirir muchas de las obras que dieron forma a una notable y variada colección de arte.
Si se caracterizó Ezequiel González por algo fue por su filantropía. Dedicó parte de su vida a mejorar la de los demás a través de su interés por la educación de los niños y la mejora social en general. Un año antes de su fallecimiento, en 1902, donó 250.000 pesetas, una fortuna en su época, para la puesta en marcha y mantenimiento de una escuela de niños pobres de la plazuela del Salvador. A su muerte en 1903 dejó como patrono de la escuela a la Diputación Provincial.
Para que su colección de arte permaneciera en Segovia y fuera patrimonio de todos, legó al instituto de I.E.S. Mariano Quintanilla todas las obras de su propiedad, donde hoy se conservan.
El original de este mes se podrá ver en el patio del Archivo Histórico Provincial hasta finales del mes de julio, de lunes a viernes, de 9.00 a 14.00 horas. Además, los miércoles y viernes, a las 12.30 horas, se realizarán visitas guiadas en las que se explicará al público los detalles del documento de Ezequiel González. Para asistir a estas presentaciones realizadas por el personal del centro es necesario pedir cita previa llamando al teléfono 921 46 10 42.