El Plan de Empleo Provincial permitirá este año la creación de más 200 puestos de trabajo gracias a las distintas líneas con la que cuenta este programa financiado por la Junta de Castilla y León, la Diputación y los ayuntamientos participantes, y cuyo presupuesto final se acercará a los dos millones de euros. En la línea más importante del programa conocida como Preplan -aquella que permite la contratación a los ayuntamientos de trabajadores para realizar obras de interés público o servicios esenciales-, participan este año unos 130 ayuntamientos de la provincia. Cada uno de ellos contratará un empleado para los seis próximos meses por lo que recibirá un mínimo de 2.500 euros de la Junta de Castilla y León y la Diputación, mientras que el Consistorio aportará una cantidad similar o mayor, en función de si el contrato es de media jornada o quiere que la jornada de trabajo sea superior.
La Junta ha destinado a este Preplan 447.000 euros, la Diputación unos 103.000 euros y los ayuntamientos participantes como mínimo 325.000 euros. Estas ayudas que reciben los municipios, de las que quedan excluidos los de más de 5.000 habitantes -que cuentan con una línea de ayudas directa desde la Junta-, se encuadran en la II Estrategia de Empleo, Formación Profesional, Prevención de Riesgos laborales e Igualdad y Conciliación en el empleo de Castilla y León, aprobada a principios de este año como fruto del diálogo social.
El objetivo de las ayudas es incentivar la contratación por las entidades locales de desempleados pertenecientes a los colectivos considerados prioritarios en la II Estrategia Integrada de Empleo: jóvenes menores de 35 años, preferentemente sin cualificación, mayores de 45 años, especialmente quienes carezcan de prestaciones y presenten cargas familiares, y parados de larga duración (más de un año ininterrumpido) y muy larga duración (más de dos años ininterrumpidos). Al mismo tiempo, con estas ayudas se promueve la realización por entidades locales de obras y servicios esenciales, de interés público o de carácter productivo que contribuyan al desarrollo socioeconómico de la provincia. Este tipo de operarios resultan muy útiles a los ayuntamientos para realizar trabajos de todo tipo, muy necesarios en cualquier época del año, pero cuya necesidad se incrementa con la llegada de la primavera y el verano ante el aumento de habitantes que registran la mayoría de las localidades de la provincia.