El alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, ha pedido a la Dirección General de Paradores Nacionales que detenga el ERE que contempla el despido de cuatro trabajadores en la capital porque Segovia “vive del turismo y la cultura”. Aunque en el caso del establecimiento de La Granja las medidas contemplan el despido de tres empleados, el edil hizo especialmente referencia al de la capital porque según explicó, es rentable económicamente.
Por este motivo, la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Segovia aprobó una declaración institucional en la que se exige la paralización de las medidas contra el establecimiento que consideran “seña de identidad del turismo en la ciudad”. En este sentido, el edil explicó que la merma de trabajadores supondría una rebaja a los servicios que presta la propia ciudad a sus visitantes, y recordó que Segovia “no es industria”.
En texto asegura que las medidas, que contemplan la extinción de 644 contratos en toda en la red lo que representa un 14% de la plantilla, acarrearán graves perjuicios, no solo para los respectivos territorios sino para el conjunto de turismo regional y nacional, “dañando incluso nuestra imagen territorial”.