Izquierda Unida ha denunciado hoy el coste de la última Asamblea de Izquierda Unida, de cerca de 30.000 euros, y ha solicitado la eliminación de las mismas de forma inmediata. El coordinador general de la formación, Jose Ángel Frías, ha cuestionado la responsabilidad actual «no sé muy bien qué pintan aquí» y ha criticado que «por poco más de una hora y cuarto» los consejeros hayan percibido trescientos euros. Así lo ha confirmado tras recibir el ingreso del representante en la formación, Fernando Écija, quien aseguró que aún no ha decidio qué hará con la dieta «no sabemos si la devolveremos o se la daremos a Sanchez Gordillo para que pague alguno de los carros», han ironizado, en relación al alcalde de Izquierda Unida que hace unos días asaltó establecimientos de alimentación.
El coordinador en Segovia de la coalición de izquierdas, afirmó «no tener palabras para la actitud del PP y el silencio cómplice dle PSOE» y criticó la confusión sobre Caja Segovia y Bankia. «Cuando hay que investigar el cobro de partidas, la responsabilidad es de Bankia, si preguntas a Bankia es del Estado, si preguntas el Estado…». Por su parte, el representante de Izquierda Unida en la Asamblea de Caja Segovia, Fernando Écija, dijo entender que se abonen los desplazamientos pero mostró su rechazo a las dietas, más teniendo en cuenta, lamentó, «que la Obra Social ha descendido en más de un 45%». Además, Écija aseguró tener la sensación de que «la caja sigue siendo la Caja aunque nos intenten vender que sólo es Obra Social». En este sentido, exigió al Gobierno la rápida conversión en fundaciones públicas las obras sociales y exigió que se impida la venta de Patrimonio. «Tenemos conocimiento de que se está intentando vender la oficina central, sin éxito»; dijo a los medios de comunicación convocados. A su juicio, si Caja Segovia sigue siendo accionista de Bankia, la entidad segoviana podrá poseer en breve un porcentaje de una entidad solvente y abogó a actuar con responsabilidad.