Si para todo el que hace el Camino de Santiago es una experiencia inolvidable, por un motivo u otro, para las personas con esclerosis múltiple es un reto a todos los niveles.

Sin embargo, estos grandes valientes de ASGEM, la Asociación Segoviana de Esclerosis Múltiple, y sus acompañantes, han demostrado un año más, que para ellos y ellas no hay barreras.

La iniciativa surgió el año pasado cuando a Jaime Burgos, tesorero de la Asociación, se le ocurrió la idea de hacer el Camino de Santiago ¡en burro!. Se lo comentó a  su amigo Alberto Herrero, de Bercial, que ya había hecho el Camino en diferentes ocasiones, desde distintos lugares y experiencias. Pero, Alberto le hizo otra propuesta que Jaime no pudo rechazar, hacer el Camino de Santiago con afectados por esclerosis múltiples y acompañantes.

Y, así, iniciaron en septiembre del año pasado una ruta que, en este 2024, ha tenido continuidad.

Primera etapa, 2023

En la primera etapa, llegaron a Santiago de Compostela. La llegada a la plaza del Obradoiro se convirtió en «un mar de lágrimas». La emoción les invadió hasta tal punto. Y no es para menos. Recorrieron juntos 120 kilómetros, y algunos de ellos ni siquiera se conocían, superando sus propias dificultades y limitaciones.

Segunda etapa, 2024

Tras la experiencia pasada, este año decidieron completar el recorrido desde Santiago de Compostela a Fisterra.

Tampoco fue fácil, porque tuvieron que subir una cuesta de tres kilómetros de tierra, con bastones, hasta llegar al faro para ver el atardecer. El inmenso esfuerzo mereció su recompensa, y fue una gran hazaña.

Y, así, este grupo de afectados por esclerosis múltiple, Jaime, Antonio, Aisha, Francisco Javier, Samuel. Miguel Ángel y Soraya, ésta última no pudo ir este año porque iniciaba un tratamiento, demostraron su gran fortaleza. Sin importarles los kilómetros, sus capacidades, horas bajo frío, lluvia o aire, cansancio… Juntos para lo bueno y lo malo, entre llantos y risas, en una experiencia inigualable y para la que agradecen, especialmente, la labor de Alberto Herrero que se encargó de organizar cada etapa diariamente, reservar en albergues, preparar rutas, lo que llevarían los acompañantes, y todo lo necesario para hacer el Camino más fácil.