Desde la avenida Padre Claret, pasando por el futuro anillo verde ciclista, hasta el barrio de La Albuera. Una anchura de 2,20 metros al que hay que añadir un paseo peatonal paralelo de 1,80 metros, separados por una pequeña median y limitado por un seto vegetal a un lado y un muro de losas de piedra, al otro. Así es el nuevo carril bici que se ha inaugurado en Segovia por el Alcalde, Pedro Arahuetes, acompañado por la Subdelegada del Gobierno, María Teresa Rodrigo, y de varios concejales, en la que han trabajado, de manera coordinada, las concejalías de Patrimonio Histórico y Medio Ambiente.
El Carril Bici Urbano construido en el Parque del Santo Ángel de la Guarda, en la ladera sur del cementerio, es uno de los 15 proyectos del Ayuntamiento financiados por el Fondo Estatal para el Empleo y Sostenibilidad Local del Gobierno de España.
Con la puesta en servicio de este nuevo carril bici, se sigue potenciando el uso de la bicicleta como medio de transporte no contaminante. Con 345 metros de longitud, el carril bici discurre por el interior del parque, sobre uno de los caminos peatonales en el que se ha preparado una plataforma de 5 metros de ancho.
Para marcarlo se ha empleado un pavimento terrizo rojizo y un encintado lateral con piedra natural. En distintos puntos, el carril bici está atravesado por pasos de peatones en cuya construcción se ha empleado adoquín de hormigón en tonos rojizos. Este mismo material se ha colocado tanto al principio como al final de la senda.
Junto a la fuente situada en la zona de juegos infantiles, se ha preparado un área de descanso con aparca-bicis. El carril cuenta con la correspondiente señalización horizontal y vertical, así como de un balizamiento luminoso a lo largo de todo el recorrido, que permitirá su uso con seguridad.
En la zona de conexión con el Camino de las Arenas se ha ensanchado la plataforma existente, eliminado la escalera y construido, en su lugar, una rampa. Los materiales empleados en su construcción permiten a ciclistas y peatones identificar de manera fácil y segura la senda, pero sin ocasionar impactos estéticos y visuales.
Tras la construcción del carril bici se ha realizado una plantación de 120 alibustres en setos y cerca de 40 árboles entre fresnos autóctonos, pinos, castaños, tilos y chopos lombardo, con riego por goteo.