La pandemia de COVID-19 hizo descender un 20 por ciento la criminalidad juvenil el año pasado, en los que la población tuvo que estar confinada en su casa durante tres meses por el coronavirus y se prohibieron las salidas nocturnas durante los sucesivos estados de alarma. Así figura en la Memoria de la Fiscalía correspondiente al año 2020, que este lunes presentó la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, en la Apertura del Año Judicial.
Según esos datos, se produjo en paralelo un descenso del 19,69 por ciento en la incoación de diligencias preliminares y de un 20,84 por ciento de los expedientes. También descendieron en un 16,47 por ciento los escritos de alegaciones. En materia de violencia doméstica ejercida por menores se registró una cifra ligeramente inferior al año anterior y en violencia de género se registró una cifra sensiblemente inferior a la del año 2019.
La Fiscalía venía detectando un importante incremento de los delitos contra la libertad sexual en los últimos años en esta franja de edad. Sin embargo, en 2020 descendieron las cifras de estos delitos, dato que también se atribuye a la pandemia. La violencia en el ámbito escolar registró por ese mismo motivo un descenso muy acusado por la suspensión de la asistencia presencial.
Durante 2020, se dictaron un 19,58 por ciento menos de sentencias, de las que el 91,31 por ciento fueron condenatorias según lo interesado por el fiscal. El 72,04 por ciento lo fueron por conformidad.
En cuanto a los menores en situación de riesgo, hubo una reducción del 36 por ciento de los expedientes respecto de 2019. Y en relación a los casos de absentismo escolar, el ministerio público emitió una nota interna para unificar criterios durante el confinamiento. En todo caso se registró una incidencia muy escasas en número y gravedad.