La Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Segovia ha comenzado los trabajos para reparar el muro de defensa del camino y del colector de aguas residuales situados por debajo del puente de la Moneda, en la margen derecha del río, frente al Real Ingenio, por los daños provocados por la crecida del río Eresma a su paso por la ciudad los días 11 y 12 de diciembre. El coste de estas obras de reparación supera los 27.000 euros, según la información recogida por Ical.
El muro de defensa contiene el empuje del río a la salida del azud de La Moneda, a continuación del puente, y sirve a su vez para delimitar el paseo principal, muy frecuentado, de la ribera del Eresma que une San Marcos-La Fuencisla con la Alameda del Parral. Además, este muro tiene como función proteger el colector general del lado norte de la ciudad que transcurre paralelo a la margen derecha del Eresma.
La riada causada por los deshielos desmoronó el muro, afectando a un tramo de 25 metros que ahora es preciso retirar y rehacer. Esta reparación es prioritaria, ya que el agua sigue empujando la estructura poniendo en riesgo no solo el camino, ya derrumbado en buena medida, sino también el colector general, que podría descalzarse, ya que está vinculado al camino y al resguardo del muro afectado.
La afección por el colapso de la pared podría afectar a la base del emisario y consiguientemente a su estabilidad, lo cual podría derivar en problemas serios dada la importancia de esta infraestructura y sus implicaciones derivadas sanitarias y ambientales. Está previsto acotar el tramo y desmontar el muro, apartando los mampuestos para su posterior reutilización, y retirando la tierra existente del muro original.
Una vez desmontado y llegado al lecho del cauce se añadirán mampuestos más grandes y pesados del mismo tipo o similares para formar una buena base donde apoyar el resto de muro. Posteriormente se aportará hormigón hidráulico de fraguado inmediato para unir todo el conjunto y poder tener la base en condiciones donde levantar el muro.
Una vez dispuesta la base se montará la pared siguiendo la misma disposición que tenía antes de su derribo. Finalmente se colocará el cerramiento existente, que previamente se habrá desmontado nada más iniciar los trabajos, y se dejará el camino como estaba antes de la subida de las aguas.