Cerca de 300 estudiantes se dieron cita en la manifestación convocada días a atrás por la Asamblea de Estudiantes de Segovia para protestar contra la reforma laboral. En la convocatoria, a la que acudieron representantes de los alumnos y de los principales sindicatos, se procedió a la lectura de un manifiesto en la que se solicitó el paro de la reforma laboral del Gobierno de Mariano Rajoy y de los recortes del Ejecutivo. “La reforma laboral afecta a los trabajadores, y a nosotros que somos los futuros trabajadores del país”, señaló Jorge Benavente, uno de los representantes de los alumnos convocados.
La Plaza del Salvador de la capital segoviana, en la que se concentran varios institutos, fue el punto y final de una manifestación que comenzó por la mañana por los diferentes centros públicos segovianos donde los estudiantes fueron informando de las reivindicaciones y de la convocatoria preparada. En concreto, los centros María Moliner, La Albuera, Ezequiel González, Mariano Quintanilla y la Escuela de Arte de La Casa de los Picos, fueron algunos por los que pasaron los convocados pasaron informando de la cita de huelga general.
Benavente hizo especial hincapié en la necesidad de parar los recortes en Educación , Sanidad y Servicios Sociales y criticó los “beneficios que se dan a la Iglesia”. En este sentido, el representante de los alumnos destacó que “es el momento de unirse y formar un solo movimiento”, para lo que explicó que se prevé la creación de una asociación de estudiantes en los próximos días.
Durante la cita, en la que no se registraron altercados, se procedió a la lectura de un manifiesto en el que se criticó a los gobiernos socialista y popular, y en el que se tildó a la reforma laboral como “un ejemplo más de los brutales ataques contra la clase trabajadora”. La lectura, que fue recibida con aplausos de los allí convocados, aseguró que las medidas tomadas por el Gobierno “suponen la generalización del despido libre y gratuito y deja a los trabajadores y trabajadoras en una situación de precariedad sin precedentes”.
Para finalizar se abogó por una “educación pública, laica y de calidad”, y se criticaron “los planes de privatización de la universidad, tras la implantación del Plan Bolonia y la implantación de la Estrategia Universidad 2015”, los “continuos despidos a los que se enfrentan los trabajadores de la educación pública”, y la “creación de un sistema de becas basado en las notas que saque cada alumno y no en la renta familiar”.