La Junta de Castilla y León ha destinado durante este año 10,3 millones de euros a programas de prevención, atención e inserción social para luchar contra las drogodependencias, según destacó hoy la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco.
“Dentro del VII Plan Regional sobre Drogas 2017-2021 el trabajo se desarrolla a través de tres redes, concretamente, la de planes sobre drogas, la de prevención familiar y la de asistencia”, enumeró.
La Red de Planes sobre Drogas se desarrolla en colaboración con los 15 ayuntamientos de más de 20.000 habitantes y ocho diputaciones provinciales, a falta de la incorporación de la de Segovia.
En Zamora, el Ayuntamiento de la capital y la Institución provincial cuentan con sendos planes locales sobre drogas, que la Junta contribuye a financiar con 224.519 euros con cargo al Acuerdo Marco de Servicios Sociales.
La Red de Prevención Familiar se desarrolla con las entidades del Tercer Sector Social y de las corporaciones locales y está integrada por diez servicios de prevención para la intervención precoz con las familias y los menores en situación de mayor riesgo de sufrir problemas con las drogas. Las actuaciones se completan con los programas de prevención en centros educativos y en el ámbito extraescolar.
Un total de 13.156 menores y jóvenes participaron el pasado año de forma telemática en estos programas de prevención y de disminución de los riesgos asociados al consumo de drogas, principalmente de bebidas alcohólicas. Esta cifra, contabilizada en el año de la pandemia, es algo menor de la que suele registrarse en un año ordinario, cuando el número de usuarios ronda los 19.300, según precisaron fuentes de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades.
Por último, la Red de Asistencia al Drogodependiente, también desarrollada con las entidades del Tercer Sector, es una red “diversificada, de calidad, profesionalizada y accesible para los usuarios, sin listas de espera”.
En la actualidad, cuenta con 80 centros y servicios específicos para drogodependientes, 69 de los cuales son gestionados por entidades del Tercer Sector con financiación de la Gerencia de Servicios Sociales. En 2020, a pesar de la pandemia, más de 11.000 drogodependientes fueron atendidos por esta red, algo menos que en un año ordinario, en los que se superan los 12.600.
Otras adicciones
Isabel Blanco, quien visitó hoy el centro ‘Proyecto Hombre Zamora’, que gestiona Cáritas Diocesana, incidió en el aumento de la incidencia de las denominadas ‘adicciones sin sustancia’, como el juego patológico y las adicciones a las nuevas tecnologías, que se vieron agravadas durante los confinamientos, aspecto sobre el que también advirtió el presidente de la organización católica en Castilla y León, Antonio Jesús Martín.
Los programas en este ámbito se desarrollan a través del Plan de Acción Coordinada 2019-2021, junto a las Consejerías de Sanidad y de Educación. En el ámbito de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, el trabajo se centra en la inclusión de sesiones específicas sobre adicciones sin sustancia dentro de los programas de prevención familiar y extraescolar del consumo de drogas y de fortalecimiento familiar ‘Construyendo mi futuro’ y ‘Educar en familia’, en la impartición de formación especializada a los profesionales y en el apoyo a las asociaciones de jugadores patológicos y a otras entidades del Tercer Sector para sus labores asistenciales. “Este año se ha creado una línea específica de financiación a través del Acuerdo Marco de Servicios Sociales, dotada con 100.000 euros y dirigida a las corporaciones locales, para financiar la realización de programas de sensibilización, información y prevención de comportamientos de riesgo relacionados con las adicciones sin sustancia”, apuntó la consejera.
“El próximo año, se va a renovar y reforzar el Plan de Acción Coordinada para incluir a la Consejería de la Presidencia, competente en la regulación legislativa del juego y las apuestas en Castilla y León, prestando una especial atención a los menores de edad y a las personas más vulnerables que ya presentan conductas compulsivas ante el juego y las apuestas”, anotó.
Isabel Blanco hizo hincapié en que las políticas de la Junta de Castilla y León sobre dependencias se basan “en la coordinación y cooperación” con las administraciones y, especialmente, con las entidades del Tercer Sector. “Estamos construyendo entre todos un modelo de prevención y una red de asistencia a drogodependientes para llevar a cabo una atención integral, que incluye también su integración social y laboral”, destacó.
“El año pasado, 818 drogodependientes participaron en diversas modalidades de formación prelaboral y profesional ocupacional, que dieron lugar a 59 contrataciones. Nuestro objetivo es siempre afrontar los nuevos retos en materia de adicciones que van surgiendo, dar respuesta a las nuevas y más complejas necesidades y llegar a más personas, especialmente a las que se encuentran en una situación más vulnerable, así como concienciar a la sociedad de los riesgos del alcohol, las drogas o la adicción al juego para evitar caer en estas adicciones”, concluyó.