Este año, el ‘Encuentro de Escritoras y Escritores’ organizado por el Foro Social de Segovia en la Academia de San Quirce, se ha centrado en la libertad de expresión y de pensamiento. Como en cada edición, los autores se reúnen, comparten un paseo literario y un concierto, en esta ocasión, en homenaje a Federico García Lorca, titulado ‘Trece canciones populares antiguas’.

En palabras de la moderadora de estas jornadas, Raquel Casas, esta oportunidad «nos brinda el acercamiento a la realidad que nos proponen los autores con su obra» y reflexionó en cómo sus escritos «nos alientan en las luchas y nos acompañan y enfocan las múltiples preocupaciones que continuamente aquejan a nuestro mundo, acompañándonos para mejorarlo».
Se han abarcado temas como el neoliberalismo, de la mano de Alberto Santamaría, profesor de arte y su relación con la filosofía, la política y la cultura o sobre la igualdad en movimientos sociales de todo tipo, incidiendo especialmente en su participación activa en el movimiento feminista, con ayuda de Ana Muiña.

Libertad

Su intervención se centró en una profunda reflexión sobre la libertad, considerando desde el principio que el ansia de libertad es intrínseca al ser humano y que por tanto, cualquier existencia de servidumbre provoca la existencia de la rebeldía. Considera que la libertad no es un regalo, sino que se alcanza con un acto consciente de acción individual y colectiva, de ayuda mutua y cooperación.

Muchos argumentos jalonaron y ejemplifican su intervención, especialmente sobresalientes los dedicados al patriarcado, considerándolo como una anomalía de la humanidad; las luchas por la libertad durante el siglo XIX; las malas condiciones de vida del capitalismo industrial; el duro trabajo de las mujeres, especialmente en los pueblos y la falta de reconocimiento del mismo, con unos procesos de emancipación que no han tenido en cuenta a la mujer; los movimientos feministas y los sindicatos internacionalistas fundados por mujeres; la olvidada y muchas veces desconocida lucha por la libertad en los países asiáticos. Concluyó su intervención indicando que la libertad únicamente puede tomarla quien la desea realmente.

24 años de persecución

Completó el turno de ponencias Pinar Selek, quien desarrolló su intervención en francés. Su emotiva e impactante exposición comenzó explicando que está atravesando un duro momento por la persecución jurídica del gobierno turco de Erdogán que se prolonga ya durante 24 años y que en estos momentos amenaza con una injusta sentencia condenatoria.

Pinar Selek tiene doble nacionalidad turca y francesa. Nació en Turquía y desde siempre ha luchado, y sigue haciéndolo, por la justicia social y los colectivos más reprimidos: niños de la calle, prostitutas, kurdos, migrantes, anticapitalismo, antimilitarismo, feminismo y tantas otras luchas. Esta actividad incansable ha provocado la persecución del gobierno turco, pero también los movimientos de solidaridad y comités de apoyo en muchas partes de Turquía y Francia, pero también en otros lugares del mundo, como en este momento ocurre en Segovia

Pinar se considera nómada y en viaje continuo y que su propia experiencia le ha demostrado que en todas partes encuentra hormigas sonrientes y solidarias y que gobiernos autoritarios, militaristas y represivos como los de Turquía, Irak y tantos otros no pueden con esas hormigas.