“Todo nuestro conocimiento nos viene de las sensaciones”, afirmaba Leonardo Da Vinci y, tras el éxito cosechado por la iniciativa ‘Pequeños Exploradores’, puesta en marcha el año pasado por el Área de Cultura y Juventud de la Diputación, los niños de la provincia volverán a experimentar esas sensaciones que les provoca su entorno más cercano, con el objetivo de adquirir conocimiento; que no es otra cosa que la auténtica base de la cultura.

En esta ocasión serán los niños y las familias de Fuenterrebollo, Grajera y Pinarejos, cuyos Ayuntamientos quedaron excluidos el año pasado del proyecto por haberse cubierto el cupo, los que tendrán la oportunidad de encontrar el arte en la ciencia de sus localidades. De nuevo, y tal y como ha explicado esta mañana en la Casa del Sello en rueda de prensa la diputada de Cultura y Juventud, Sara Dueñas, ‘Pequeños Exploradores’, volverá a fijar una serie de sendas en estos entornos en las que habrá ocasión de aprender sobre la botánica de la zona y conocer las especies que la habitan de una forma divertida y aventurera. Junto a la diputada han comparecido ante los medios la alcaldesa de Grajera, Alba Barrio; el alcalde de Pinarejos, Heliodoro Ríos, José Antona; y el teniente alcalde de Fuenterrebollo, Daniel Sacristán.

Estas rutas, que transcurrirán por los pinares y lagunas de la Dehesa, Cencerradas y Terreña en Fuenterrebollo, por el pinar y Desillas en Grajera y por Las Cotorras en Pinarejos, han sido diseñadas por unos técnicos medioambientales que se encargarán también de ejercer de cicerones en el máximo de tres visitas guiadas financiadas por la Diputación, que se harán por cada una de las sendas.

No obstante, una de las ventajas que tiene esta propuesta, y que hoy recordaba Sara Dueñas, es que se trata de una iniciativa duradera en el tiempo, ya que las rutas quedan marcadas y pueden ser empleadas como recurso didáctico, al a par que lúdico, por los colegios, padres, las asociaciones culturales o los propios Consistorios. Además, para cada una de las sendas se edita un folleto informativo con ilustraciones originales, fotografías, un plano y un pequeño texto del que se han realizado 200 copias por ruta.

El objetivo de este peculiar club que aúna cultura y ciencia, tal y como ha hecho saber Sara Dueñas, es que los niños segovianos sean conocedores y tengan conciencia, a través del recordatorio de nombres y datos, de la flora y en ocasiones también la fauna, que habita el territorio más cercano a sus lugares de residencia. Además, a través de ‘Pequeños Exploradores’, se espera que los niños generen respuestas emocionales y se sensibilicen con un medio ambiente que, en muchas ocasiones y por falta de información, no entienden por qué debe ser respetado.

A lo largo de entre dos y tres horas, los participantes –nunca más de 25 personas- en las visitas guiadas de ‘Pequeños Exploradores’ podrán pasear, jugar, preguntar y aprender de una manera diferente, que además incluye el regalo de un cuaderno de campo, una gorra, una caja de pinturas y una chapa de verdadero ‘pequeño explorador’.