Los vecinos del pueblo de Segovia contra el cierre de la sucursal de CaixaBank en la localidad, se concentraron a las puertas del banco convocados por el Ayuntamiento de Boceguillas.
De este modo, «manifiestan su total oposición y rechazo al cierre parcial de la oficina que la entidad está realizando», señalan en un comunicado.
Al inicio de la concentración, guardaron un minuto de silencio simbólico, «para expresar sus condolencias con la decadencia del medio rural que continuamente imponen desde las ciudades, grandes empresas y otros organismos y/o administraciones».
Seguidamente, «entre proclamas espontáneas de ‘no al cierre de CaixaBank’ y ante el centenar de personas congregado a las puertas de la sucursal de CaixaBank en Boceguillas», se leyó un manifiesto.
Precisamente, en el manifiesto «se dejó constancia de que con la merma de servicios se pone en peligro la supervivencia de los pueblos y las opciones de futuro de sus vecinos».
También se dejó claro «que Boceguillas tiene otra realidad, muy distinta a la que quieren hacer creer que tiene». Su realidad, detallan, es que «apuesta, trabaja y lucha a diario por su presente y futuro» y, por tanto, «no conformarse con medidas como la que CaixaBank está aplicando».
Creen en los pueblos del medio rural
Además, son claros entusiastas de «la vida en el medio rural porque no pueden imaginar otra mejor».
Por ello, defienden, creer en los pueblos «es creer y buscar nuevas oportunidades, es alzar la voz, una y mil veces para decir alto y claro que los pueblos merecen la misma vida, los mismos servicios y la misma dignidad que la de las grandes ciudades».
En consecuencia, claman los vecinos, «CaixaBank no puede dejar sin una atención personal y directa completa a las más de las 50 empresas que están establecidas en Boceguillas».
Tampoco a más del 20% de la población con una edad superior a 70 años, «a los que poco a poco arrinconan y someten a una exclusión financiera inmerecida, obligándoles a relacionarse con una maquinita que no entienden y no siempre funciona».
Para terminar, y lamentándose de que la solución del problema sólo depende de quien lo ha creado, piden a CaixaBank que reconsidere su decisión. Son «conscientes de que se está luchando por una utopía»; sin embargo, consideran que la entidad puede buscar «otras alternativas, que con voluntad, seguro encuentran».
En peligro el futuro del pueblo
Además, considera que no disponer de una sucursal bancaria operativa al 100% va a dañar el avance futuro del municipio y su imagen como opción para el desarrollo económico de la comarca.
Lamentan que, de ese modo, se tirará «por la borda de un plumazo el esfuerzo y trabajo de tantos años.
Por ello, «los vecinos de Boceguillas y su Ayuntamiento seguirán unidos con la determinación de seguir mejorando, con la esperanza de que hay un bonito futuro por delante, a pesar de las adversidades, orgullosos de lo que son», advierten.
800 firmas en una semana
Boceguillas ha recogido en una semana más de 800 firmas contra el cierre de CaixaBank. «Son más de 800 personas las que han opinado voluntariamente y tienen criterio propio para decir no al cierre parcial de la oficina de CaixaBank en Boceguillas», recalcan.
Por último, los vecinos pusieron de manifiesto «que la decadencia del servicio cada día es patente, que no siempre todo vale y que no se puede permitir el cierre continuo de oficinas solamente justificado en una rentabilidad desorbitada».
El Ayuntamiento de Boceguillas está «muy satisfecho con el respaldo de sus vecinos, su respuesta ha sido abrumadora». De hecho, el consistorio «invitó a los responsables de CaixaBank a asistir a la concentración». Sin embargo, esta invitación fue declinada «al considerar que tienen mejores medios para medir la satisfacción de sus clientes. Eso sí, ese día, encontraron medios para poner personal de seguridad en la oficina. ¿Era necesario? Desde el primer momento todo se ha realizado de forma pacífica y desde el diálogo», recuerdan.
Próximas medidas
Los vecinos de Boceguillas tienen previsto continuar con las reivindicaciones. Así, enviarán a CaixaBank las firmas recogidas. Al mismo tiempo, plantean aprobar una moción en pleno para que las administraciones establezcan mecanismos legales que impidan estas decisiones unilaterales que atentan contra el medio rural, así como buscar contactos para unirse a otros movimientos, siempre en contra de la exclusión financiera.