Dos auxiliares para 40 residentes

FeSP-UGT de Sanidad y Familia de la Junta de Castilla y León denunció hoy la dejación que están sufriendo los trabajadores que prestan sus servicios en las residencias de mayores por parte de la Junta de Castilla y León, “al no realizarles la prueba diagnóstica del Covid-19’, recordando además que, desde hace 15 días, los trabajadores de la Residencia Asistida de Segovia, están aportando datos voluntariamente para solicitar la prueba, que se a hecho a un número muy reducido de la plantilla.

Según FeSP-UGT, desde la Gerencia de Servicios Sociales les comunicaron ayer que esta prueba del coronavirus solo se va a realizar única y exclusivamente a los trabajadores con patologías previas o que presenten síntomas compatibles con el Covid-19. En su opinión, al no realizarse las pruebas al personal, se está poniendo “en peligro la salud de los residentes”, que pertenecen al grupo de población más vulnerable.

Los trabajadores atienden a residentes que han dado positivo en el test, a los que presentan síntomas compatibles con el Covid-19 y residentes sin síntomas, en aislamiento preventivo por contacto estrecho con caso posible o confirmado de esta enfermedad, así como, trabajadores que están en situación de baja laboral por ser positivos en Covid-19.

Desde FesSP-UGT dejaron claro que, a pesar de la dura situación que se está viviendo en la Residencia Asistida, la plantilla sigue acudiendo diariamente a sus puestos de trabajo, con la inseguridad de que pueden ser portadores y desconocerlo, con el riesgo añadido que esto supone para las personas que están atendiendo y para su familia, por lo que exigieron que se realice la prueba del Covid-19.

Exigen a la Junta de Castilla y León los test al ser “una medida preventiva necesaria” para contener el Covid-19, remarcando la profesionalidad de lo trabajadores de las Residencias de Servicios Sociales de Segovia, que necesitan estar sanos para poder seguir cuidando a las personas mayores.