La Capitán María del Carmen De los Reyes dirige al equipo militar encargado de vacunar a la población en los pueblos de Segovia en la ‘Misión Baluarte’.

Vinculada desde su infancia a la localidad de San Rafael, De los Reyes está destinada en la Academia de Artillería de Segovia.

-¿Cómo está viviendo la experiencia por los pueblos de Segovia vacunando personas contra el Covid?

La experiencia está siendo gratificante y también innovadora desde el punto de vista de la sanidad militar porque estamos acostumbrados a trabajar, en la mayoría de las ocasiones, con personal militar. El trabajo con personal civil te da otro puntos de vista, te complementa y te enseña.

-Dirige la vacunación en los pueblos de Segovia, ¿cómo la reciben los vecinos?

Al principio se sorprenden. Nos preguntan si es que no hay médicos para vacunar. Les explico que soy enfermera titulada y que decidí desarrollar mi carrera profesional en las Fuerzas Armadas en las que existe un cuerpo militar de Sanidad con diferentes especialidades, al que se oposita.

En general, la aceptación de la gente es bastante buena, son agradables y se sienten agradecidos.

-¿Cómo se organiza el trabajo durante este proceso de vacunación por la provincia?

Tengo a mis órdenes a un cabo con titulación de sanitario y a un soldado conductor que se ocupa de la labor administrativa. Ambos están perfectamente formados para desarrollar esta labor.

 

Habitualmente, quedamos en el Polígono de Baterías, donde cogemos el vehículo asignado, con carga de mechero para enchufar la nevera en la que llevamos los viales que necesitamos cada día y que recogemos en la Biblioteca de Segovia, actual punto de vacunación.

Es nuestro día a día desde el 4 de enero de 2022 que fue cuando comenzamos a vacunar en los pueblos de Segovia.

-¿Ha tenido miedo de contagiarse por Covid-19 trabajando?

Actualmente, no; pero con respeto siempre. Ya me contagié durante el primer estado de alarma. Además, la gente que va a vacunarse se entiende que no está contagiada, llevamos mascarillas, reforzamos la higiene de manos y, en definitiva, guardamos todas las medidas de seguridad correspondientes.

-Con tan solo 31 años es capitán… ¿Cómo ha sido el camino hasta aquí?

Ha sido un camino de trabajo y esfuerzo. Primero estudié la carrera y obtuve el Grado en Enfermería por la Universidad Complutense de Madrid. Posteriormente, me dediqué a las oposiciones que conseguí sacar al tercer intento.

Tras un año de instrucción militar y sanitaria en distintas academias y tres destinos, ahora estoy destinada en la Academia de Artillería de Segovia donde llevo dos años.

En la Academia de Artillería de Segovia me siento bien y contenta, he recibido una acogida perfecta por parte de la propia Academia, de la ciudad y de los segovianos

-¿Siempre quiso ser militar?

Sí. Lo tenía muy claro desde los 18 años.

-¿Ser mujer le ha dificultado su carrera profesional?

No, francamente no. En ningún destino he sentido discriminación. Todos somos compañeros, igual hombres que mujeres.

-¿Qué vínculo tiene con San Rafael?

Mi familia tiene una casa de veraneo. Todos mis veranos los paso allí.

-¿Qué planes de futuro tiene?

Seguir haciendo mi deber día a día. Cumplir mi misión.