Es el tercer monumento de esa capital del medievo, como si de una ciudad de juego de hadas se tratase. Las primeras noticias que se tienen de él datan de 1.122. Es uno de los palacios-castillos más suntuosos del siglo XV.
Alfonso X el sabio fue uno de los monarcas que, junto con Felipe II, más residieron en dicha fortaleza, porque era una fortaleza segura y muy cercana a zona de caza. Felipe II se caso en dicho palacio. Fue prisión de estado, para todos aquellos que cometieran algún delito contra el estado de derecho.
El rey Carlos III instaló en dicho edificio “El real Colegio de Artillería” donde se formaron los artilleros Daoiz y Velarde, entre otros muchos. Desde entonces está muy enraizada el arma de Artillería en la sociedad segoviana, que todos los ayuntamientos sean de color político que sean, al terminar los alumnos, en dicho centro, con el despacho de sargentos el Ayuntamiento les nombra hijos adoptivos de la ciudad de Segovia. En 1.862 sufrió un incendio que afectó a la techumbre de las salas nobles del edificio. En la segunda planta se encuentra el archivo general militar.
Cuando la fortaleza alcanza su grandeza y Magnificencia Los días de fiesta y vísperas de fiestas con la iluminación exterior que parece más la proa de un barco con sus famosos torreones. Yo invitaría en estas noches de bonanzas a verlo desde la cuesta los Hoyos y desde la Fuencisla. Hay un montón de leyendas a cuan más bonitas, la más conocida la de María del salto (la judía conversa)
Fdo: Ángel Colado Sánchez CMF ) misionero claretiano