La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) vaticinó hoy la aproximación de un nuevo frente que llegará a la Comunidad en los próximos días, previsiblemente el 7 de enero, que resultará especialmente activo en todo el territorio y que complicará la circulación en las vías de alta capacidad. La peculiaridad de este episodio radica en varios factores: que se tratará de un fenómeno “extremadamente duradero”, que se alargará durante varios días, presumiblemente hasta el domingo; y que las nevadas serán persistentes e intensas, alcanzando, incluso, casi toda la meseta, donde se esperan acumulaciones de entre cinco y diez centímetros.
Las zonas más afectadas serán las provincias de Ávila, Segovia y Soria, principalmente en las vías que comunican Castilla y León con Madrid. En ellas pueden llegar a superarse los 30 centímetros y, previsiblemente, todas las capitales de provincia de la Comunidad se verán afectadas por copiosas nevadas.
Así se puso de manifiesto en una reunión del Comité Ejecutivo Regional de Coordinación de Actuaciones ante Situaciones Meterológicas Extremas, presidida por el delegado del Gobierno. Este fenómeno preocupa de cara a este episodio invernal principalmente por la “lluvia engelante”, que se produce cuando las precipitaciones en forma de lluvia son muy suaves pero el frío del ambiente hace que el agua se congele prácticamente al contactar con el pavimento. Esto puede provocar peligrosas capas de hielo en las vías que multiplican el riesgo de accidentes durante estas fechas.
El encuentro de hoy, realizado de forma telemática, ha servido para hacer un repaso de las actuaciones que se han llevado a cabo durante los últimos días en los que ha sido necesario activar fases de alarma y preemergencia en algunas zonas de Castilla y León para garantizar la circulación en todas las vías de alta capacidad en nuestro territorio. Si bien se ha producido embolsamientos de camiones en diferentes ocasiones, estos han sido muy ágiles, de muy poca duración, y “no han supuesto apenas complicaciones para el tránsito de vehículos”.
Las demarcaciones de carreteras Oriental y Occidental han trabajado desde el pasado día 28 de diciembre y hasta el día , para mantener la normalidad en las vías de la Comunidad. Disponen de 363 máquinas quitanieves que en la última semana han recorrido casi 77.000 kilómetros para la realización de labores de prevención y otros 25.000 kilómetros en los que han retirado la nieve acumulada. Durante estos trabajos han esparcido 17.100 toneladas de sal y 8,05 millones de litros de salmuera. Estos trabajos se han llevado a cabo tanto en vías del Estado como en autopistas de peaje.
El delegado del Gobierno insistió durante la reunión en la “importancia de la anticipación ante este tipo de fenómenos meteorológicos adversos” y pidió a todas las partes implicadas su coordinación y “esfuerzo” para que las vías de alta capacidad de la Comunidad “permanezcan en las mejores condiciones posibles”. Para ello, “se trabaja ya en medidas de prevención, de cara a evitar sorpresas, y se intensificarán los trabajos de mantenimiento a medida que las condiciones climatológicas vayan empeorando”.
A juicio de Javier Izquierdo, “lo singular del suceso que se avecina lo hace más preocupante, desde el punto de vista de la vialidad, porque se van a ver afectadas casi todas las vías de alta capacidad de Castilla y León, independientemente de la provincia a la que pertenezcan”. Los puertos de montaña y los límites con otras comunidades autónomas serán, como siempre, puntos de especial sensibilidad cuando sufrimos este tipo de inclemencias”.
El delegado insistió en que “ante esta situación extrema es recomendable no hacer desplazamientos por carretera que no sean estrictamente necesarios”. “La situación será sumamente complicada a pesar de que ya estamos trabajando para minimizar los efectos de este temporal”, comentó, para instar a utilizar fuentes oficiales para mantenerse informados.