El Sindicato de Enfermería, Satse Castilla y León, ha denunciado la “mala gestión” que Sacyl está llevando a cabo en la crisis del coronavirus y las irregularidades en la planificación del material protector, ya que en la actualidad hay falta de equipos de protección individual (EPIS) para los profesionales sanitarios en los centros sanitarios de la Comunidad, “lo que entraña riesgos para su salud y para la situación de la población en general”.
Satse, que ha remitido un escrito a la consejera de Sanidad y al gerente regional de Salud denunciando esta situación, critica que se están produciendo limitaciones en determinados casos para el uso de equipos de protección individual, dentro del uso racional de los mismos. En este sentido, el sindicato asegura en un comunicado recogido por Ical que se está recibiendo llamadas de preocupación de profesionales por la situación que se está produciendo en algunos centros sanitarios. En concreto, Satse ha recibido quejas porque en la provincia de Burgos, los sanitarios no tienen equipos de protección individual suficientes y adecuados para atender a los pacientes. Hay escasez de batas desechables y de mascarillas.
Además, a estos profesionales, según Satse, se les está obligando a compartir unas únicas gafas de protección para su uso por todos los profesionales enfermeros en una unidad completa de aislamiento, con la única medida de desinfección prevista para esas gafas de lavarlas con agua y solución hidroalcohólica antes de pasárselas a otro profesional.
El sindicato reclama que se tomen “las medidas adecuadas para garantizar la protección de los trabajadores, dotando a todos los centros de trabajo, hospitales, centros de salud , residencias de ancianos y consultorios locales de los equipos de protección individual adecuados y recomendados por el Ministerio de Sanidad”.
Al mismo tiempo, también denuncia que existe falta de información y formación a los profesionales, sobre todo a los de nueva incorporación, lo que genera más posibilidades de transmisión.
A su vez, Satse insiste en que los consultorios locales también deben ser provistos de EPIS y asetgura que “no puede tolerarse que las medidas de protección recomendadas por la Gerencia Regional sean mantener una distancia de dos metros y aislar al sospechoso en una habitación hasta que acuda el 112, máxime cuando numerosos consultorios locales de Castilla y León no reúnen siquiera las condiciones para ello”.