El Ayuntamiento de Segovia, a través de la concejalía de Medio Ambiente, ha realizado en los últimos meses diferentes trabajos de mejora y acondicionamiento en el Jardín Botánico.
El artista Mariano Carabias ha sido el encargado de restaurar los murales del Jardín Botánico. Tras un intenso trabajo en taller para encontrar de nuevo los colores, la gama y las texturas necesarias, en el mural “Usos del suelo” se han repuesto las baldosas deterioradas y quebradas, se han sustituido las cerámicas deterioradas y reparado in situ las piezas menos dañadas. También se ha procedido a la limpieza del mural, se han eliminado los graffitis y rellenado las juntas entre baldosas con cemento.
En el resto de murales, además de restaurar cerámicas y esgrafiados, se ha eliminado la suciedad, los líquenes, verdín y pintadas. Se han tapado las grietas de los muros y repintado los elementos de color que habían quedado debilitados por el paso del tiempo. Por otra parte, se han repuesto las piezas de cerámica rotas y eliminado el salitre incrustado en la “fuente de la vida”. Las intervenciones, que dieron comienzo el pasado mes de octubre, han contado con una inversión que supera los 24.000 euros.
Además de estas obras, la concejalía ha llevado a cabo trabajos de reparación de daños y mejoras en el Jardín Botánico, con el objetivo de fomentar el buen uso de este espacio por parte de la población, y que este cumpla su misión didáctica y de esparcimiento.
La actuación ha consistido en la mejora y la limpieza de las bancadas de plantas arbustivas, muy deterioradas por la intemperie y el uso continuado. Tras esto, se han instalado albardillas de granito con el fin de protegerlas y habilitarlas para su función de contención y banco. El presupuesto de estos trabajos (albañilería y cantería, preparaciones previas, tratamiento de residuos y medidas de seguridad y salud) es de 48.000 euros.
Por otro lado, El Ayuntamiento de Segovia ha editado el libro “Una Visita al Jardín Botánico de Segovia, Centro de Biodiversidad Urbana” de María Gris y Felipe Arroyo. Se trata de una recopilación” de datos, reseñas, documentos, elementos vegetales y ornamentales… sobre este espacio de nuestra ciudad. El objetivo del libro es conocer el origen y la evolución del Jardín Botánico, remarcar su gran valor educativo y divulgativo y exponer todos los trabajos y vicisitudes que tuvieron que solventarse para llegar a tener un lugar como este en nuestra ciudad.
Los textos y recopilaciones con los que cuenta el libro han sido elaborados y rescatados por María Gris Maroto, ingeniera técnico agrícola especializada en Hortofruticultura y Jardinería y licenciada en Ciencias ambientales, y Felipe Arroyo Rueda, ingeniero municipal en la concejalía de Medio Ambiente y coordinador municipal de Educación Ambiental. Se trata de una edición no venal que el Ayuntamiento próximamente enviará a las bibliotecas de la ciudad y a los centros escolares y focos de interés.