La Plataforma Estatal de Enfermera Escolar desarrollará a lo largo de los próximos meses en Castilla y León una nueva estrategia de actuación, bajo el lema ‘Su salud, tu tranquilidad’, que contempla una recogida de firmas en Change.org para solicitar la presencia de, al menos, una enfermera en cada colegio e instituto de la Comunidad. También, celebrarán reuniones con los consejeros de Educación y Sanidad y representantes políticos para lograr que haya, al menos, un enfermero en los centros escolares de la Comunidad y la presentación de iniciativas como PNL y mociones en los ayuntamientos, las diputaciones provinciales y las Cortes.
Profesorado, padres y madres y enfermeros realizarán numerosas acciones de sensibilización social, como la difusión de todo tipo de material informativo en distintos soportes (escrito, audiovisual y ‘online’). Se realizará también una encuesta entre la ciudadanía para conocer el grado de respaldo a la demanda de la Plataforma.
La Plataforma Estatal de Enfermera Escolar -integrada por el Sindicato de Enfermería, Satse; el Foro Español de Pacientes, FEP; el Sindicato Independiente de la Enseñanza Pública Anpe; y la Federación Española de Diabetes, Fede- ha decidido poner en marcha esta nueva estrategia de actuación conjunta ante el desinterés de las consejerías de Educación y Sanidad por implantar una medida que beneficiaría a todos los alumnos, padres, profesorado y el resto de la comunidad educativa.
Según la Plataforma, el principal motivo del rechazo de las administraciones es el económico cuando generalizar la figura de la enfermera escolar sólo supondría entre 16 y 20 euros al año por habitante. La organización lo considera un coste “irrisorio” si se compara con los miles de millones de euros que conllevan para el sistema sanitario público distintos problemas de salud que una enfermera escolar podría prevenir
A modo de ejemplo, la Plataforma apunta el sobrecoste de 2.000 millones de euros al año derivado de la obesidad, o los más de 5.000 millones de euros al año de costes directos de la diabetes (tratamientos y hospitalizaciones) y los más de 17.000 millones al año de costes indirectos (absentismo laboral, jubilaciones anticipadas y gastos sociales).