La Fundación para el Desarrollo Rural Macario Asenjo Ponce celebró el 4 de junio su encuentro anual en el que se entregaron de los Premios Macario Asenjo Ponce. A las seis de la tarde comenzaron los actos festivos con un parque infantil ubicado en la plaza mayor de la localidad. Paralelamente una cata de pan artesano, dirigida por la panadería de Juan Carlos Sanz, de Santo Tomé del Puerto, dio la posibilidad a los más de 50 asistentes de conocer de primera mano los diferentes métodos de elaboración, con ingredientes naturales y la fabricación artesana, además de mostrar varios tipos de panes: centeno, espelta, trigo sarraceno, de semillas, y pan de tritordeum. Contó con la colaboración de Florindo Fierro, profesor y técnico en panadería, quien indicó las características y ventajas saludables de cada uno de ellos.
A las ocho comenzó la entrega de premios, que un año más reunió a los vecinos de la Comarca Nordeste, para rendir por un lado su recuerdo y homenaje a Macario Asenjo Ponce, fallecido en 2004, y por otro reconocer la labor silenciosa y a veces olvidada de pequeños colectivos vinculados al Medio Rural que durante años han estado trabajando en diferentes actuaciones, para hacer más fácil y digna la vida en los pueblos.
Unas palabras de bienvenida de Diego López Bayo, alcalde de Campo de San Pedro, dieron paso al protagonismo de los premiados que, en esta ocasión han sido la Asociación de Vecinos “La Alegría” de Alconadilla, en su modalidad provincial y la Asociación Laboran JOSENEA de Lumbier (Navarra), en la modalidad nacional.
La Asociación “La Alegría”, desde su creación en 1979, no ha dejado de hacer mejoras para el pueblo y actividades culturales intergeneracionales. Por su parte la Asociación Laboran JOSENEA mostró en su presentación su compromiso con el Medio Rural, especialmente con las personas con dificultades de inserción socio-laboral, quienes a través de la formación y con el acompañamiento necesario, se incorporan al mercado de trabajo.
El acto finalizó con la Intervención de Teodoro Gutierrez Barbolla, Presidente de la Fundación Macario Asenjo Ponce, quien un año más reivindicó el papel del Medio Rural, y la necesidad de trabajar juntos para conseguir objetivos comunes.
Foto: Premiados en la edición 2016 de la Fundación Macario Asenjo Ponce